Aprobaron un nuevo régimen de residencias médicas para atacar la falta de profesionales en Neuquén
La Legislatura sancionó hoy la ley propuesta por el gobernador Rolando Figueroa. Tendrá incentivos económicos para quienes se radiquen en el interior y para ciertas especialidades.
La Legislatura sesionó este miércoles desde el mediodía. La votación fue 26 a 2. Foto: Matías Subat.
La Legislatura de Neuquén aprobó este miércoles en general, y por mayoría, un nuevo régimen para las residencias médicas en la provincia que reemplazará al vigente desde el 2008. El proyecto, enviado por el gobernador Rolando Figueroa, tuvo 26 votos a favor, dos en contra y hubo siete ausentes.
La propuesta avanza sobre los criterios de acceso, permanencia y egreso a las residencias, determina estímulos económicos de arraigo por ubicación geográfica, criticidad y especialidad, entre otros puntos.
Este año se inscribieron 206 profesionales de Neuquén, otras provincias argentinas e incluso otros países como Costa Rica y Ecuador a la convocatoria que lanzó el ministerio de Salud para las residencias. El objetivo del gobierno es que, quienes ingresen, lo hagan bajo el nuevo régimen que aprobaron los diputados.
Verónica Lichter (PRO), miembro informante del despacho, destacó que los residentes «respondieron de forma numerosa a la convocatoria que hizo el ministerio de Salud» y defendió que la ley «busca fortalecer una atención médica de calidad en todas las zonas sanitarias porque apoya a todos los residentes que decidan hacer esta etapa de formación en las más alejadas de la capital». También afirmó que promoverá una mejora en la atención primaria de la salud.
Francisco Lépore (Avanzar) también agregó que la ley le dará herramientas al gobierno para resolver la falta de profesionales, «uno de los principales problemas que tiene el sistema, principalmente en el interior». Dijo que actualmente hay 288 residentes en la provincia y que un 82% está en Neuquén capital.
El proyecto había recibido críticas del sindicato de profesionales, Siprosapune, que incluso había presentado una alternativa que se incorporó a un despacho de minoría.
El diputado Andrés Blanco (FIT), quien votó en contra al igual que Lorena Parrilli (Unión por la Patria), señaló que las sugerencias del gremio «eran aportes para algo que va a tener serias consecuencias».
Analizó que el incentivo económico por arraigo «es en detrimento de la formación y la calidad de los profesionales» y planteó que debía discutirse el salario de los profesionales.
El problema real es que los salarios profesionales son bajos tanto para residentes como para los profesionales del sistema. La lógica de los incentivos sigue la misma mirada destructiva de la gestión anterior”.
Críticas del Siprosapune a la ley que aprobó la Legislatura
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