Trabajadores del Conicet protestaron en Bariloche contra el avance de los despidos
El gobierno nacional impuso una nueva tanda de despidos en dependencias del Conicet y los trabajadores del organismo salieron a la calle para expresar su rechazo a la medida y en defensa del "sistema científico". Cosecharon muestras de solidaridad de los transeúntes.
La volanteada recibió la solidaridad de numerosos automovilistas (foto Chino Leiva)
Una nueva tanda de 86 despidos que aplicó el gobierno nacional sobre los planteles del Conicet en todo el país generó el repudio de la red de becarios, el gremio ATE y el personal del organismo, quienes se movilizaron hoy para exigir su reincorporación y la renuncia del presidente que asumió en diciembre, Daniel Salamone.
Por convocatoria de ATE, y en coincidencia con otras manifestaciones similares de todo el país, los trabajadores locales del Conicet realizaron hoy al mediodía una volanteada sobre la avenida de los Pioneros, en la puerta del Centro Cientifico Tecnologico Patagonia Norte.
Numerosos automovilistas hicieron sonar sus bocinas en solidaridad con los manifestantes, cuya consigna principal fue “no al ajuste de Milei”. Los becarios subrayaron la “desesperante” situación de quienes son notificados sobre la no renovación de sus contratos, que vencen a fin de mes.
Según informaron, se produjeron en la última semana casi un centenar de despidos en distintos institutos del Conicet. Al menos una de las cesantías fue aplicada en Bariloche y afectó a una persona con tareas administrativas.
La técnica del instituto Idypca y delegada de ATE Alhue Gavuzzo explico que el rol de esa empleada era indispensable para “la vinculación tecnológica” y se suma a otros anteriores que impidieron completar tareas de comunicación, entre otras. Señaló que desde entonces las redes sociales del instituto quedaron desactivadas, lo mismo que la renovación de la página web.
La delegada dijo que si bien por ahora los despidos no alcanzan al personal científico, el avance sobre los administrativos “resiente todo”. Y también los afectan los recortes sobre otras dependencias del Estado, como el cierre de Agricultura Familiar, porque hay mucho trabajo “interconectado”, salidas al campo y otras tareas integradas.
“No necesitar despedir científicos para vaciar el Conicet”, dijo Gavuzzo. Explicó que el estrangulamiento del presupuesto, que quedó congelado en valores del año pasado, es suficiente para condicionar la actividad de investigación, como ocurre con las universidades.
“No sobra nadie”, “ciencia es soberanía”, “Conicet en emergencia” y “paro general” decían algunos de los carteles enarbolados por los trabajadores a la vera de la ruta.
Gavuzzo insistió en denunciar “la precarización histórica” con contratos de renovación anual, que afecta a muchos empleados del Conicet -en algunos casos desde hace una década- sobre lo cual se agrega el ajuste del nuevo gobierno.
En relación con los sueldos, afirmó que existe una paritaria todavía en curso y que el gremio UPCN aceptó la propuesta oficial, pero ATE mantiene su rechazo, porque los haberes en muchos casos “no cubren siquiera la canasta familiar”.
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