Condenaron a la extesorera de Cipolletti a 2 años de prisión en suspenso
María Laura Illesca no podrá ejercer cargos públicos de por vida. En un juicio abreviado se acordó la pena y las pautas que impuso la jueza Florencia Caruso.
María Laura Illesca, en la audiencia de hoy junto a su abogado Michel Rischmann. (Florencia Salto)
María Laura Illesca reconoció que robó fondos del erario público mientras ejercía el cargo de Tesorera del municipio de Cipolletti. Cómo narró la fiscalía, la mujer transfería dinero a cuentagotas a una cuenta bancaria a nombre de su madre. Fueron más de cinco millones de pesos en un minucioso trabajo hormiga que le llevó más de un año.
La exfuncionaria debió reconocer los delitos que le imputaron para acceder a un juicio abreviado. Además, renunció a todos las impugnaciones posibles y la condena quedó firme automáticamente.
La jueza de juicio Florencia Caruso homologó hoy el acuerdo al que llegaron las partes y le impuso una pena de 2 años de prisión en suspenso y una serie de pautas que debe cumplir para mantener el beneficio. No podrá ejercer cargos públicos de por vida.
Illesca fue imputada por los delitos de administración fraudulenta y peculado, con una escala penal de 2 a 16 años de prisión. Sin embargo, al no tener antecedentes y una serie de atenuantes difícilmente hubiese recibido una pena de prisión efectiva en un juicio. Por eso, tanto la fiscalía como la querella –el municipio- accedieron al acuerdo que impulsó el defensor de la exfuncionaria, Michel Rischmann.
De esta manera el proceso culminó en apenas seis meses. Un tiempo corto para este tipo de delitos. La fiscal del caso fue Eugenia Vallejos, pero en la audiencia de hoy participó el fiscal jefe Santiago Márquez Gauna, mientras que la defensa la ejerció Michel Rischmann. La querella fue patrocinada por el exjuez Guillermo Moyano.
La exfuncionaria del municipio de Cipolletti, con gran conocimiento en el área, generaba un gasto inexistente y así lograba que un banco hiciera pequeñas transferencias a esa cuenta. Eran sumas menores, entre 60 y 80 mil pesos, lo que eludió en muchas oportunidades las auditorías internas.
Sin embargo, en mayo pasado la contadora municipal comenzó a notar una serie de irregularidades en el manejo de fondos y logró descubrir las maniobras delictivas de Illesca.
El intendente Claudio Di Tella, la denunció penalmente y ordenó una auditoría interna más exhaustiva. Luego la suspendió y finalmente la echó del municipio.
En la audiencia no se discutió si habrá alguna reparación económica por parte de la condenada. Pero con esta sentencia, el municipio podrá reclamar la devolución de los fondos o una indemnización por los daños en un proceso distinto que tramitaría ante el fuero contencioso administrativo.
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