Quién es la joven de Patagonia Norte que habló sobre el ambiente en Finlandia
Estudia en la Universidad Nacional del Comahue y promueve la economía circular
Marianela Pepe, de Junín de los Andes, expuso sobre jóvenes y el futuro del ambiente en el Foro de Koli en Finlandia
Desde Patagonia Norte, una joven estudiante de ingeniería química viajó a Finlandia para hacer oír su voz sobre el rol de los jóvenes frente a la crisis ambiental que sufre el planeta Tierra.
Se trata de Marianela Pepe, quien nació en Junín de los Andes, Neuquén y ha estado participando en iniciativa. Es técnica en ciencias de la Alimentación y estudia ingeniería química en la Universidad Nacional del Comahue. La joven contó a Diario Río Negro que desde niña sintió un gran interés en todas las temáticas que tienen relación con lo socioambiental y la naturaleza. Recibió una gran influencia de su mamá, Ana Beatriz Prieto, quien es profesora de Biología y master en enseñanza de Ciencias, para participar en congresos o para acompañarla a sus clases.
La joven recordó que al crecer comenzó a participar de proyectos y fue así que junto a su madre decidieron cofundar en 2014 el Club de Ciencias Huechulafquen en Junín de los Andes. Consiste en un espacio de educación para que los jóvenes se interesen en temas que tienen que ver con la tecnología, ciencias, ingeniería o matemática. “En el club realizamos muchos proyectos de calidad ambiental. Varios de ellos fueron premiados”, indicó la joven.
Uno de los grandes trabajos de investigación que realizó junto a otros jóvenes obtuvo el Premio Argentino Junior del Agua y fueron finalistas del Stockholm Junior Water Prize. Ese trabajo tuvo como eje analizar la distribución y abundancia de mosquitos. Marianela señaló que el trabajo consistió en analizar la distribución y abundancia de larvas según el tipo de hábitat y las compararon con las condiciones climáticas. Obtuvieron muestras del río Chimehuin.
“Analizábamos si las poblaciones de mosquitos que estaban ahí eran posibles transmisores de enfermedades. En Junín de los Andes no teníamos enfermedades que hayan sido transmitidas por mosquitos de la zona. Pero éramos conscientes de que esos insectos se estaban trasladando hacia zonas más al sur por el cambio climático”, explicó. Encontraron que había mosquitos de la especie Culex, que no transmite el virus del dengue.
El premio nacional que ganó con su equipo fue un gran paso que la motivó para continuar investigando.Con grandes reconocimientos y miles de proyectos en mente, Marianela también participa en varios programas internacionales como el Programa GLOBE, ENO Programme y se desempeña como miembro del Consejo de Jóvenes Líderes de EarthEcho International.
En el caso de Globe es un programa con distintas actividades patrocinado por la agencia espacial de los Estados Unidos, la NASA. Marianela participó en presentaciones de proyectos de investigación que luego eran presentados en ferias de ciencias.
En cuanto al Consejo de Jóvenes Lideres, comentó que sus integrantes se encargan de promocionar programas de calidad ambiental y ayudan a los interesados a potenciar sus ideas y proyectos. “Los miembros del consejo orientamos sobre qué actividades son de interés y pueden tener gran impacto realizarlos”, resaltó.
Por gran recorrido a tan corta edad y su talento, Marianela fue una de las invitadas especiales del Foro de Koli que se realizó el 11 y 12 de octubre en Parque Nacional Koli, Finlandia. “Me llamaron por un contacto con otro programa internacional con el que estaba colaborando con plantaciones de árboles y calidad ambiental en general”, contó.
En este foro, la joven participó como oradora sobre asuntos de juventud y desarrollo sostenible. Según explicó, la temática principal del evento se focalizó en los desafíos que enfrentan las ciudades, las regiones, las industrias y los recursos naturales en su camino hacia una bioeconomía circular.
La bioeconomía circular engloba al conjunto de actividades económicas que buscan la sostenibilidad, la innovación y el replanteamiento de servicios con la sociedad, explicó.
Marianela realizó una presentación a la que tituló «¿Qué esperan los jóvenes para la vida laboral y la sociedad futura?». Frente a un gran público, abordó la perspectiva de la generación de los jóvenes en la transición hacia una bioeconomía circular. Además, defendió su postura y enfatizó la importancia de “involucrar a los jóvenes en la toma de decisiones», y destacó que las nuevas generaciones esperan una sociedad y una vida laboral más sostenibles.
En este sentido expresó: “Últimamente se ha estado sumando gente a esta perspectiva. Se nota que quieren disfrutar del ambiente y hacer algo, especialmente en los pueblos más chicos. Pero aún me continúa preocupando que en las ciudades más grandes no se le dé relevancia. Necesitamos que el mundo sea un poco más consciente de los daños que provoca al ambiente y podamos hacer algo para revertirlo”, subrayó.
El foco en el cambio climático y los jóvenes
“Mi principal idea de mi presentación en Finlandia fue exponer lo poco que nos acordamos de cuidar el planeta, considerando la situación de crisis climática que está ocurriendo a nivel mundial. Para el año 2030, fecha en que la mayoría de los acuerdos internacionales relacionados al tema pretenden haber cumplido sus objetivos, la mayoría de los jóvenes de mi edad vamos a estar recibidos y trabajando”, dijo Marianela Pepe.
Días atrás, el Programa de Naciones Unidas para el Ambiente, advirtió que este año 2023 las temperaturas mundiales y las emisiones de gases de efecto invernadero han alcanzado máximos históricos. En su último Informe sobre la Brecha de Emisiones concluye que las actuales promesas realizadas en el marco del llamado Acuerdo de París sitúan al mundo en la senda de un aumento de la temperatura de entre 2,5 y 2,9 °C por encima de los niveles preindustriales en este siglo, lo que destaca la necesidad urgente de intensificar la acción por el clima.
De cara a la cumbre sobre cambio climático que tendrá lugar en Emiratos Árabes Unidos, el organismo internacional especificó que se requieren mayores transformaciones con bajas emisiones de carbono para cumplir de aquí a 2030 con los recortes de emisiones de gases de efecto invernadero prometidos: un 28% para el objetivo de 2 °C y 42% para el objetivo de 1,5 °C. “Se requiere eliminar de raíz la nefasta causa de la crisis climática: los combustibles fósiles. Esta transición hacia las energías renovables debe ser justa y equitativa”, aseguró António Guterres, Secretario General de las Naciones Unidas.
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