Bibliotecas populares en Roca: «Son el corazón del barrio»
El martes 17 realizarán una actividad donde harán visible el trabajo de las bibliotecas en los barrios. Las personas se encontrarán con libros, internet, cursos, contención y mucho más.
Marta se emocionó al recordar su labor en las bibliotecas populares de la ciudad. Foto: Andres Maripe.
Desde hace años las bibliotecas populares ocupan un rol importante dentro de los barrios. Allí los vecinos han podido encontrar contención emocional, educativa y la posibilidad de crecer. «Son el corazón del barrio», apuntó una de las trabajadoras de éstas.
Isabel Nahuelñir y Victoria Jaramillo son dos trabajadoras del equipo de bibliotecarias de la ciudad. El martes 17 a las 5 de la tarde en el INCA llevarán adelante una actividad para difundir la labor que realizan desde esos espacios.
En una entrevista realizada en el programa «Ya es tiempo», explicaron que las bibliotecas se han ido transformando con las herramientas de la tecnologías. Hoy las personas no van a buscar solo libros, sino también se acercan a realizar trámites, cursos, juegos y mucho más.
En total hay 13 y cada una tiene su esencia, su «identidad», apuntó Isabel y agregó que cada una tiene su propia historia. «En la biblioteca de J.J Gómez se hacen trámites de Anses, de Pami, becas, municipales», explicó.
«Las personas se apropian del espacio, traen a sus hijos y nietos», indicó y agregó que desde allí les transmitían el aprendizaje cultural instalado en la biblioteca.
La misma también cuenta con una escuela primaria para adultos. «Es para aquellas personas que no tuvieron la oportunidad de ir a la escuela. Ahí estamos nosotros para abrazarlos y contenerlos», expresó la mujer.
El rol del estado
Victoria señaló que las bibliotecas populares son asociaciones civiles, sin fines de lucro. Reciben un aporte de 20 pesos por cada socio, pero no alcanza para «sostenerse durante todo un año». Estas asociaciones también reciben el aporte institucional de Conabip.
Es por ello que las trabajadoras de las distintas bibliotecas comenzaron a pensar de qué manera podían visibilizar los trabajos que realizan dentro de las mismas para acercar esas actividades a la comunidad.
«Nos sumamos a la campaña nacional de Conabip «Votá por tu Biblioteca», y le enviamos a todos los candidatos de Río Negro un acta compromiso para que en caso de ganar apoyen todas las leyes de bibliotecas populares», remarcó Victoria.
Así el día de la actividad difundirán quiénes son los candidados que apoyan a las bibliotecas. Además contarán qué trabajos realizan y acercarán libros de Derechos Humanos a las personas.
La historia de las bibliotecas
Marta Marilef desde hace años ha sido una de las grandes impulsoras para que hoy existan bibliotecas populares en los distintos barrios de la ciudad de Roca. En una entrevista exclusiva con Diario RÍO NEGRO contó cómo fue contruir y sostener esos espacios.
Comenzaron con «La callejera» hace más de 20 años. «Eran épocas difíciles como la de ahora y decidimos ir el 23 (día de las bibliotecas) a festejar a la plaza de los emprendedores donde venían productores de todo tipo», recordó Marta. Desde allí las personas podían observar su labor y los vecinos ansiosos se acercaban para ayudar y donar sus libros.
Luego de un tiempo Conabip vio que había una biblioteca en la calle y les enviaron libros para hacerla crecer.
Tiempo después la mujer observó que habían abierto una escuela en J.J Goméz y no tenían libros. «Vi que se podía hacer algo más así que di vueltas por el barrio y encontré un local que era un bar abandonado. Conseguí entrar y junto a los profesores y al padre Barbudo comenzamos a trabajar. Había libros y energía».
«Conseguimos chapas y levantamos las paredes y el 1 de mayo festejamos el día del estudiante trabajador», explicó.
A partir de ese momento la biblioteca comenzó a ser un lugar fundamental para los jóvenes. No sólo encontraban un espacio que los abrazaba y los contenía, sino también un lugar para capacitarse. «Empezamos a realizar cursos de oficios, como bibliotecología, encuadernación», dijo con lágrimas en los ojos, pues la provincia los declaró de interés debido a que abrían las puertas a los estudiantes para que se inserten en el sistema laboral.
También realizaban cursos de música y crearon su propio equipo de fútbol.
Con el tiempo fueron creando otras bibliotecas como Crecer, en el barrio Aeroclub; Amancai en Chacramonte y en La Rivera. «Me motivaba crear bibliotecas. Tenía que confiar en los vecinos y motivarlos», señaló.
Fueron creciendo cada vez más y los libros pasaban de casa en casa. Actualmente las bibliotecas siguen mutando y sosteniendo a la población, es por ellos que las bibliotecarias invitan a la sociedad a participar de la actividad que se realizará el martes 17.
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