Por un drama familiar intentaron desalojar a una mamá y sus cinco hijos
Yanina, tiene 33 años y vive en su hogar desde que nació, el departamento pertenecía a su abuela. Una orden de desalojo buscaba que la mujer abandone el hogar, pero finalmente se suspendió.
Un intento de desalojo en Cipolletti podría dejar sin hogar a una mamá y sus cinco hijos. Yanina, tiene 33 años y vive en su hogar desde que nació, el departamento pertenecía a su abuela. Luego de que su abuela falleció, su tía inició los trámites legales para ser la propietaria del departamento, pasadas varias instancias judiciales, hoy Yanina despertó con una orden de desalojo en su puerta. Finalmente esto no ocurrió.
Desde las nueve de la mañana se está llevando adelante un intento de desalojo en el barrio Managua, de Cipolletti. En el lugar, vecinos y referentes barriales, buscan impedir que una familia «quede sin hogar». Luego de una hora el desalojo se suspendió.
«Vivo hace 33 años acá, me críe en este lugar. Estuve cuidando a mi abuela (la dueña del departamento) hasta sus últimos días. Cuando ella murió, mi tía inició con los papeles para ser ella la propietaria. En su momento anularon el desalojo, ella apeló y salió como única heredera, el tema es que a mi papá nunca lo notificaron de esto» explicó Yanina Montecino, la mujer que quieren desalojar de su hogar.
Yanina vive en ese domicilio con sus cinco hijos, la mayor de 15 años y el menor de dos meses. «Queremos evitar el desalojo, yo no tengo para alquilar, trabajo por hora. La última voluntad de mi abuela fue que yo me quedara con la casa, pero IPPV no le permitió hacer la sucesión sin la firma de los dos herederos» remarcó Yanina.
Vecinos y referentes barriales esperaron la llegada del municipio para brindar asistencia a la familia y finalmente se suspendió el desalojo. «En nuestra ciudad tenemos más de 20 personas en situación de calle, no vamos a seguir tolerando esto. Si se compraran tierras para los vecinos, esto se resolvería, mucho problemas son por la falta de acceso a tierras» manifestó Lila Calderón, referente barrial.
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