Quién es la científica que egresó del Balseiro y hoy dirige un laboratorio en Noruega
Soledad Gonzalo Cogno dirige un laboratorio de computación y dinámica neuronal en el Instituto Kavli.
Soledad Gonzalo Cogno egresó como licenciada en Física del Instituto Balseiro de Bariloche. Poco después, llegó la maestría y el doctorado y hoy reside en Noruega donde dirige un laboratorio de computación y dinámica neuronal en el Instituto Kavli de Neurociencia de Sistemas.
«Estoy acá por mi conocimiento, mis ideas y ganas de trabajar», resume la investigadora de 37 años.
Desembarcó en Noruega seis años atrás para realizar una estadía posdoctoral en el laboratorio de May-Britt Moser y Edvard Moser, quienes recibieron el Premio Nobel de Medicina en 2014 por sus investigaciones del cerebro. «Fueron mis mentores, mis jefes inmediatos hasta hace pocas semanas que abrí mi propio laboratorio«, explica.
En el instituto Kavli trabajan 11 grupos de investigación sobre la operación de los circuitos neuronales. «Algunos lo hacen desde la biología molecular tratando de entender, por ejemplo, qué pasa cuando determinadas neuronas no están en el momento en que el cerebro se está desarrollando. O qué pasa cuando una persona envejece, cuáles son las señales en el cerebro que van cambiando. O bien qué proteínas se ven afectadas durante el Alzheimer», detalla.
Dice que en el caso de su laboratorio, se adopta una estrategia interdisciplinaria en la que se combinan la biología, matemáticas, computación y física para entender cómo operan las redes de neuronas. «Nos interesa entender cómo un conjunto de neuronas se comunican y cuáles son los patrones de comunicación entre ellas y cómo esta comunicación está vinculada a funciones cerebrales o comportamientos específicos», puntualiza.
El laboratorio que dirige Gonzalo Cogno recibió financiamiento para los próximos 10 años, lo que consideró algo «impensado» en Argentina. «A veces, la gente que no hace ciencia no sabe que, en realidad, los proyectos científicos ambiciosos y grandes duran más de cuatro o cinco años. Obtener financiamiento a 10 años permite arriesgarnos a algo nuevo, novedoso. Es sostener un plan de trabajo sin tener que estar sujetos a tiempos de cambio», plantea.
El financiamiento, considera, es la diferencia primordial a la hora de trabajar en el ámbito científico en Argentina o en el exterior. «Uno puedo ponerle todo el amor del mundo, pero si no podés comprar una computadora para tus experimentos es una limitación. En Noruega hay mucho financiamiento del estado y eso se traduce en avances científicos y muchas oportunidades«, reconoce.
Calidad científica
Al mismo tiempo, asegura que no hay diferencias en materia de formación y conocimiento. «Es admirable hacer ciencia en Argentina por la calidad científica y el esfuerzo extra que hay que poner para que las cosas funcionen. Pero cuando tenés que hacer todo a pulmón es mas difícil. En otro país, comprás sin pensar cuánto sale«, señala.
Al consultarle sobre las investigaciones del cerebro, resalta los avances de los últimos 10 años y recuerda que la ciencia no es lineal. «Las cosas se dan despacito, de repente surge mucho progreso y de repente, se vuelve a estancar. Hubo un progreso constante durante los últimos 60 años que se aceleró en los últimos 10. La neurociencia se consolida como un área de investigación muy fuerte«, reconoce.
Gonzalo Cogno admite que le interesa más entender el funcionamiento del cerebro sano que el cerebro enfermo. «Pienso algún día extrapolarlo al cerebro enfermo. Yo trabajo en dos áreas cerebrales: el hipocampo y la corteza entorrinal. En estas dos áreas es donde se manifesta en estadios tempranos el Alzheimer cuyos síntomas son la pérdida de memoria y la pérdida de orientación en el espacio», resalta.
En el hipocampo, asegura, se cree que se forma la memoria; mientras que en la corteza entorrinal está el sistema neuronal que pemite ubicarnos y desplazarnos en el espacio. «El Alzheimer afecta mucho estas regiones. Ojalá, si las cosas se siguen dando bien, en los próximos años podamos entender mejor cómo funcionan esta regiones«, dice al término de la entrevista.
Soledad Gonzalo Cogno egresó como licenciada en Física del Instituto Balseiro de Bariloche. Poco después, llegó la maestría y el doctorado y hoy reside en Noruega donde dirige un laboratorio de computación y dinámica neuronal en el Instituto Kavli de Neurociencia de Sistemas.
Registrate gratis
Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento
Suscribite por $2600 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora
Comentarios