Bajó la recaudación en setiembre en Río Negro

VIEDMA (AV)- La recaudación provincial durante setiembre pasado alcanzó a los 49.711.513 pesos, según los ingresos de la Dirección General de Rentas.

Esta cifra significa una evolución negativa del 2,2% respecto al mes anterior.

El Ministerio de Hacienda destacó que este monto se compone de 3.364.670 pesos en concepto de ingresos por el Impuesto Inmobiliario, 4.912.651 pesos por el de Sellos, 9.386.711 pesos por el Impuesto a los Ingresos Brutos Directos, 27.487.008,72 pesos por Convenios Multilateral de Créditos, 3.416.360,18 pesos por patentes y 1.144.111,13 pesos en concepto de tasas.

Con estos ingresos lo recaudado en los nueve meses que va del año alcanza a la suma de 440.297.180 pesos.

Comparando setiembre de 2008 con el mismo mes del año anterior (42.352.611,04 pesos), existe una diferencia positiva de 7.358.902,80 pesos, lo que implica una evolución del 17,38%.

Cotejando con agosto pasado, los ingresos se redujeron en 1.118.364, lo que resulta en un 2,2%. No obstante, el monto percibido supera en un 13,66% a lo proyectado para agosto pasado.

La caída en Automotor responde a que no hubo vencimientos durante el mes anterior, se observó un incremento en Inmobiliario; mientras que en líneas generales se mantuvo en los parámetros «estables»; indicaron fuentes del organismo.

El organismo previó una inyección de fondos extras como consecuencia de que la semana próxima entrará en vigencia la ampliación del beneficio para morosos impositivos de Río Negro.

El régimen de regularización se extenderá en sus períodos comprendidos de las obligaciones no abonadas.

El plan de cancelación -que puede llegar a extender las cuotas hasta 10 años- favorece a contribuyentes con ingresos de hasta 1.200 pesos.

El régimen alcanza incumplimientos de los distintos tributos de 2001 y posteriores, pero la iniciativa gubernamental extiende esa cobertura para años anteriores. Hay otro segmento favorecido por el programa de pago. Se trata de contribuyentes que se encuentren sometidos a fiscalización en sede administrativa o con apremio judicial.

Esta condición para acceder al programa de regularización constituye el principal cuestionamiento, pues favorece así a los principales morosos. Es decir, deudores con menos antigüedad o que no tienen intimaciones -directamente- no pueden reclamar el beneficio.