Central y el campeón River jugaron un partidazo y empataron 3-3 por la Liga Profesional

Fue un partidazo. Central y River se sacaron chispas en el Gigante de Arroyito y la última alegría fue para el campeón, que encontró el empate a los 52 del complemento, con una aparición de Pablo Solari. Fue 3-3 en una de las mejores funciones de la Liga Profesional.

El Millo, relajado por el título y con un equipo completamente alternativo (atajó el cipoleño Ezequiel Centurión), otorgó ventajas de entrada y el Canalla pasó por caja. Es intenso cuando juega en el Gigante de Arroyito y lo demostró con un buen manejo en el medio, Nacho Malcorra como eje y la peligrosidad de Alejo Veliz, el punta más prometedor del fútbol doméstico.

Por eso no extrañó la apertura del marcador. Jaminton Campaz escaló por la izquierda, mandó un centro y el 9 de la selección Sub 20 la mandó a guardar. Arriba en las cifras, Central encontró tranquilidad y siguió con el dominio. River, fiel a su estilo, tuvo lo suyo, porque Pablo Solari inquietó y Salomón Rondón se las ingenió para complicar a una dupla defensiva que dio ventajas.

Sin embargo, cada vez que aceleró, Rosario complicó y en una contra muy clara, Malcorra decidió mal en un tres contra dos, que pudo haber aumentado las cifras. Así transcurrió la primera mitad, con el equipo de Russo superior, pero sin efectividad ante un River que siempre va al frente.

River reaccionó rápido y salió de ida y vuelta

Y esta máxima se confirmó en el comienzo del complemento, porque a los 4 llegó el empate de Rondón. Lo que avisó en el arranque, lo concretó con un gol de 9, en el área chica, que terminó con la resistencia de Fatura Broun.

El campeón aprovechó ese envión y tuvo la oportunidad de dar vuelta la historia, pero con el correr de los minutos volvió a quedarse y Central fue a fondo. Malcorra esta vez no se equivocó, decidió perfecto y metió un perfecto centro que Veliz mandó al gol.

Explotó el Gigante y cuando los cantos se multiplicaban, un fuerte derechazo de Solari desde la puerta del área sorprendió a todos. Golazo y otra vez pardas.

En la primera que tocó, Luciano Ferreyra anotó otro gran gol luego de un genial taco de Infantino y se repitió la historia. Mucho canto en la tribuna y aparición fantasmal de Solari, quien anotó a los 52 y rescató al campeón. Partidazo.