Por qué hallazgos claves de la Patagonia se enviarán a estudiar en Lituania

Neuquén se vuelve a sumergir en la ciencia para indagar un poco más sobre los primeros habitantes que habitaron el territorio.Quiénes fueron, qué hicieron, qué comían, cuántos años vivieron y hace cuánto son algunos de los interrogantes que llevaron a dos investigadores del Conicet a enviar muestras de hallazgos a Lituania para que se pueda conocer más sobre los orígenes de la provincia.

El Gobierno de la provincia de Neuquén autorizó el envío de las muestras arqueológicas a principios de enero. Sin embargo, ese proceso aún está en la primera etapa ya que para concretarlo se requiere de otros trámites previos que terminen por autorizar el traslado de las muestras que forman parte del patrimonio cultural provincial.

Al finalizar el proceso, las muestras seleccionadas serán enviadas a un laboratorio lituano especializado en datación por radiocarbono, un método que permitirá establecer la edad de los materiales orgánicos de hasta 50 mil o 60 mil años.

Entre estas muestras arqueológicas se destaca la presencia de elementos encontrados en el Sistema Cavernario Cuchillo Curá, y restos óseos de una mujer, hallados en el año 2020 en la ciudad capital.

Hace varios años que existe el interés por conocer los orígenes de quienes habitaron Neuquén antes de que se fundara como provincia y se han llevado a cabo diferentes investigaciones.

Desde 2004 un grupo de investigadores del Conicet junto a profesionales de la Dirección de Patrimonio cultural de la provincia realizan estudios arqueológicos con el objetivo de conocer cómo vivieron las poblaciones humanas.

En Neuquén hay más de 200 cavidades naturales, entre cuevas y cavernas, donde se han hallado, gracias al trabajo arqueológico, millones de evidencias de antiguos nativos.

Uno de estos sitios es el área protegida Cuchillo Curá, donde se tomaron las muestras para enviar a los laboratorios de Lituania.

El sistema cavernario Cuchillo Curá es al momento el más extenso encontrado en Argentina con un desarrollo entre sus galerías y salas, de una longitud total de cuatro kilómetros. Son cuatro cavidades: la Caverna del Templo; la Caverna del Gendarme, la Caverna del Arenal y la Caverna de Los Cabritos.

Esta última caverna es inaccesible. Se tapó su entrada por el impacto del viento.

En diálogo con RIO NEGRO Valeria Bernal, antropóloga e investigadora del Conicet, comentó que en esta área se encontró gran material lítico de materias primas diversas –normalmente son piedras talladas para la obtención del filo en uno de sus lados-, fragmentos de cerámicas, restos óseos de fauna, que podrían haber sido consumidos por quienes habitaban Cuchillo Curá en el pasado, y un motivo rupestre abstracto en el interior de la cueva de Los Cabritos.

Estos hallazgos llevan años de trabajo de campo, explicó Bernal, “mediante excavaciones y en algunas situaciones recolecciones de superficie porque el material que encontramos no está solamente bajo tierra. A veces aparece en la superficie del suelo por acción de la naturaleza”.

Todo el material rescatado llevó a responder varias preguntas en cuanto aspectos vinculados con la dieta de las poblaciones humanas, los recursos, cuestiones tecnológicas de los instrumentos para caza, “un conjunto de aspectos y preguntas que tienen que ver con la subsistencia, sobre cómo vivían en estos ambientes neuquinos”, dijo.

El segundo hallazgo del cual se tomó una muestra para enviar al exterior tiene que ver con los restos óseos encontrados en el año 2020. Los hallaron obreros a cargo de construir el desagüe de un baño en el patio de un galpón en la ciudad capital. Tras el aviso de la Policía, se realizó el rescate y una vez en el laboratorio se recuperaron datos y se supo que se trataba de una mujer adulta, explicó Bernal.

Las primeras investigaciones determinaron que se trataban de restos humanos arqueológicos con antigüedad de muerte superior a los 100 años. Pero ese hallazgo nuevamente trajo a la mesa la necesidad de saber el tiempo exacto.

“Buscamos establecer cuál es la fecha de la ocupación humana del área. Nosotros tenemos una caracterización de la forma de vida de los grupos que habitaron, pero no sabemos hace cuánto fueron parte del lugar”, aclaró Bernal.

El laboratorio encargado de hacer estos estudios se llama Vilnius Radiocarbon, y está ubicado en la ciudad de Vilna, Lituania. Es un sitio con la tecnología necesaria para realizar el estudio a partir de una pequeña muestra, donde se hará un análisis de fechado radiocarbónico y así establecer la antigüedad de las ocupaciones humanas en distintos lugares de la provincia.

Estudios como los que se harán en Lituania ya han brindado datos de que en Neuquén hubo habitantes desde hace aproximadamente 12 mil años antes del presente.

“Esta datación se obtuvo en el norte de la provincia, en Barrancas, en la Cueva Huenul, una cueva utilizada por los primeros habitantes como resguardo”, contó la antropóloga e investigadora del Conicet.

“Neuquén no se inició cuando se fundó la provincia. Hay un pasado más profundo en el que vivieron otras poblaciones, incluso antes de la llegada de los europeos”, explicó Bernal.

Cómo avisar sobre patrimonio arqueológico

“Es importante dar aviso cuando se produce un hallazgo de restos óseos, como fue el caso de la mujer hallada en una construcción o de otros elementos que pueda ser identificado como arqueológico o interés histórico”, dijo la arqueóloga Valeria Bernal.

Las denuncias se deben hacer en la dirección provincial de Patrimonio Cultural ubicado en la calle Vuelta de Obligado N°50 de la ciudad de Neuquén. No se debe alterar el área del hallazgo ni llevarse los materiales.

La presunción del delito de tráfico ilícito de Bienes Culturales en Neuquén se puede informar al 299 5361125 o vía correo a lucha.trafico.ilicitonqn@gmail.com