Estrellas de reggaeton: son de Roca y triunfaron en la escena nacional
“Dancers ML”, academia de danzas de Roca, cosechó el primer puesto en la competencia de Flavio Mendoza, en su categoría. El baile brilla como alternativa para afrontar sus problemas.
La alfombra roja porteña le abrió paso a los talentos rionegrinos y por segunda vez consecutiva, el reggaeton juvenil le conquistó el corazón a los famosos en la Capital Federal. La academia de baile que dirige el roquense Mauricio Lillo, “Dancers ML” ganó el primer puesto en la categoría Reggaeton en la Competencia Nacional de Danza de Flavio Mendoza en el Circo del Anima.
Es un grupo conformado por 24 adolescentes, preadolescentes y jóvenes de 12 a 29 años el que conquistó el título luego de pasar a la selectiva nacional e ir derribando obstáculos. En pocos meses se prepararon y dejaron todo en el escenario, cuerpo, talento, destreza, inventiva, sacrificio y sobre todo lo que los marca, una unión muy especial.
“Haber logrado el campeonato nacional en nuestro estilo que es reggaeton y en freedance subcampeones, es un gran logro”, contó Mauricio Lillo, el coach de los chicos, quien por segunda vez trae el título a Roca. Es un grupo conformado por campeones del año 2019 pero sobre todo una gran cantidad de chicos nuevos que es la primera vez que competían.
“Te encontrás con los mejores del país. Este año fue muy difícil, había mucho nivel. No pense que ibamos a llegar al podio”, reconoció el coach. “Teníamos que salir a darlo todo”, contó Mauricio.
El jurado que los evaluó estuvo conformado por referentes no solo nacionales sino internacionales: Erin Marino, invitada de Estados Unidos, coreógrafa productora de espectáculos, directora en agencia MSA talent y directora en Mtilly TV; Mario Juangorena, dancer y coach en producciones de j Balvin, Tini, María Becerra, Luis Fonsi, L Gante, Bizarrap, Rombai; y en tercer lugar Nahuel Leguizamon, dancer y coach del Bailando por un Sueño (Showmatch), miembro de Men Argentina junto a Mati Nap.
“Queremos dar un mensaje a través del baile”, contó Mauricio, quien con 29 años lidera el grupo hace siete años. Desde 2018 empezó a incursionar en el mundo de las competencias. “Tenía ganas de darle a los chicos otras posibilidades que les puede dar la danza, que no es solo hacer shows y tomar clases sino proyectar y ser evaluados hacia afuera con profesionales”, comentó.
1 millón
Para llegar a la competencia, recaudaron fondos y se autogestionaron el viaje sin ayuda del Estado ni de empresas. En unas semanas juntaron un millón de pesos con el objetivo de llegar lejos, y finalmente lo lograron.
El joven puso su propia academia a los 22 años y en todos estos años llegó a la misma conclusión. El mejor equipo no es el que mejor baila, sino el que desarrolla el más alto nivel de compañerismo. “Es fundamental para mi, priorizo dos valores: las habilidades y los valores para compartir”, aseguró.
Fueron dos meses de preparación para llegar a las selectivas y Dancers ML fueron los únicos del Alto Valle en pasar a las nacionales. Para la final, solo tuvieron un mes de ensayos, contó Vera de 16 años, una de las bailarinas que experimentó el logro.
Todos los fines de semana con ensayos a contrarreloj más el esfuerzo para juntar fondos para poder viajar a competir fueron una odisea, entre ferias de ropa, rifas, shows a beneficio y ventas de comida. “Estábamos asustados porque pensábamos que no íbamos a llegar con la plata”, dijo entre risas Vera.
Solista con 12 años
Melina con tan solo 12 años clasificó como solista en Freedance con puntaje supremo y compitió en Capital Federal con otros bailarines del país. Desde los tres años danza, todo tipo de ritmos pero ahora su vida pasa por el estilo urbano.
“Lo primero fue pasar la selectiva, fue un logro enorme. Pasar a las nacionales fue un paso grandísimo para mí. Lo disfruté bastante, con el esfuerzo y dedicación que se necesita”, relató la adolescente.
La danza como salida
La competencia termina siendo una excusa cuando se trata de proyectar y crecer en algo que los apasiona y mueve sus vidas. ¿Qué significa para estos jóvenes la danza?
“No solo me da felicidad, yo el año pasado estaba mal y la cabeza me hizo un click y pude empezar a resolver de otra manera mis cosas o a olvidarme de mis problemas por un rato”, contó una de las competidoras, de 14 años.
Milagros, con 17 años, dijo que para ella el baile es un escape de la rutina. “Pasa algo malo y la energía que hay acá te saca todo lo malo. Empecé el año pasado y ya me eligieron para competir, eso me causa mucha emoción”.
Camila está desde el 2019 y dice que para ella la academia es como su segunda casa. “Entrás acá y se te pasan todos los problemas por un rato. El compañerismo, el ambiente, el acompañamiento, la música, las risas”, describió.
Ahora, aspiran a llegar a la escena internacional y saltar a Latinoamérica. “Yo aspiro el año que viene a seguir fomentando mi urban y reggaeton, llevarlo afuera del país y competir”, cerró Mauricio. También buscan contar con mas apoyo estatal para seguir escalando y llevar en alto la cultura local.
La voz de la calle de la música urbana
“Pasar a las nacionales fue un paso grandísimo. Fue una cosa de locos, vivir una experiencia en ese escenario”
Melina (12) bailarina solista
“La selectiva fueron dos meses de preparación y para las finales un mes. Recaudamos plata con ferias, venta de comida, rifas, shows”.
Vera (16) bailarina
“La academia en sí es como mi segundo hogar. Entrás acá y se te pasan todos los problemas por un rato. Hay compañerismo, la música, las risas”
Camila (17) bailarina
“Es la primera vez que me emociono en el escenario. Me desplomé. Fue mucho sacrificio. Sentí todo el esfuerzo que habíamos hecho”
Mauricio Lillo (29 años), Profesor de danzas urbanas, “Dancers ML”
Fondos
- 1 millón
- de pesos recaudaron los jóvenes para llegar a Buenos Aires a la competencia, con ayuda de sus familias.
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