Cerraron las urnas en Italia y la ultraderecha se prepara para quedarse con el triunfo
La asistencia a las urnas fue menor al 70%, en medio de una situación nacional compleja con inflación y la suba en los costos energéticos.
La derechista y reivindicadora del fascismo Giorgia Meloni, líder del soberanista Hermanos de Italia, se imponía esta noche con claridad en las elecciones para renovar el Parlamento y conseguiría la mayoría legislativa para formar un nuevo Gobierno junto a sus socios de la Liga y Fuerza Italia, según las primeras encuestas a boca de urna, tras unas elecciones con la participación más baja de la democracia.
La alianza de derecha conseguía, según los primeros sondeos, más del 40% de los votos y superaba el 50% de las 400 bancas de Diputados y 200 del Senado en juego, lo que dejaría a Meloni a un paso de poder convertirse en la primera mujer premier de la historia del país, tras una campaña basada en el rechazo a la inmigración, políticas más duras frente a Europa y promesas de menor presión fiscal.
«Hoy escribimos la historia», fueron las palabras de Meloni antes de votar, con signos de confianza en los resultados.
Según los datos de la consultora Opinio dados a conocer por la cadena pública Rai, la coalición de derecha alcanzó entre el 41 y el 45% de los votos, mientras que la coalición de centroizquierda con eje en el Partido Democrático podría tener entre el 25,5 y el 29,5% y el Movimiento Cinco Estrellas con un margen entre el 13,5 y el 17,5%.
Así, la derecha tendría entre 227 y 257 bancas en Diputados, la centroziquierda entre 78 y 98 y el Cinco Estrellas de 36 a 56, a la espera de ver la distribución de los votos.
De acuerdo a las encuestas de YouTrend divulgadas en SKyTg24, la derecha llegaría a 228 bancas en Diputados y la centroizquierda a 95, con 47 del Cinco Estrellas. Para YouTrend, en el Senado la centroderecha alcanzaría 115 bancas, la centroizquierda 44 y el Cinco Estrellas 24.
El contexto para Giorgia Meloni
Meloni, romana de 45 años, deberá ahora cerrar el apoyo de sus socios para garantizar la unidad del espacio al presidente Sergio Mattarella y mostrarse como una opción de Gobierno estable para los próximos cinco años, la duración del Parlamento elegido hoy.
Una vez que se complete el procedimiento de formación del nuevo Ejecutivo, durante el que el mandatario tiene un rol clave, el nuevo Gobierno deberá presentarse en el Parlamento a conseguir el voto de confianza de la mitad más uno de los miembros de cada Cámara.
En las últimas semanas, los socios de la coalición de derecha habían mostrado contrapuntos por el método que elegirían para formar el Gabinete en caso de llegar al Gobierno, y este domingo el líder de la Liga Matteo Salvini dio un paso en esa dirección al asegurar que tiene «al equipo en la cabeza».
En un marco de apatía generalizada tras la campaña que atravesó todo el verano, y luego de 16 horas de votación, el ministerio del Interior informó al cierre de las urnas una afluencia menor al 70%, el dato más bajo desde 1948, cuando se hicieron las primeras elecciones de la República, y por primera vez por debajo del piso del 70%.
Más allá de qué coalición pueda mostrarse ante Mattarella como más capacitada para formar un nuevo Gobierno, el próximo Ejecutivo deberá concentrar buena parte sus esfuerzos iniciales en buscar contener la inflación, moderar el impacto de la suba de la energía y conservar el buen vínculo con Bruselas que desde febrero de 2021 mantuvo el renunciante premier Mario Draghi.
Las elecciones de este domingo se dan en un marco en el que la inflación, que a fines de agosto tocó el pico más alto en 37 años, un 8,4% interanual, se ha vuelto uno de los principales temas de preocupación de los italianos.
Con información de Agencia Télam.-
Comentarios