“Ko Ko”: suben los precios y las quejas por los servicios

“Las frecuencias son pocas y los precios son altísimos. El servicio es pésimo, vas parado varias veces y la higiene del transporte también es pésima. Por día, gasto unos 800 pesos en pasaje”, sintetizó una estudiante universitaria que viaja de lunes a viernes a Neuquén para cursar en la Universidad del Comahue.

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Así como esta joven, son miles los usuarios -sobre todo trabajadores y estudiantes- que deben trasladarse cotidianamente por las ciudades del Alto Valle en el único medio y empresa disponible. Lo hacen hace décadas con unidades desbordadas por la cantidad de pasajeros, situación que había mermado en la pandemia y que volvió a reiterarse con el retorno pleno a la presencialidad en todos los ámbitos. “Viajamos como animales”, fustigó una mujer de Roca mientras esperaba el colectivo en las dársenas.

Sin embargo, en el último tiempo se incrementaron las quejas por la reducción de servicios, que luego de la pandemia, no se restableció al 100%. Tal es el caso del servicio “Expreso” de Ko Ko o más conocido como “Rápido” que dejó de funcionar los domingos y feriados; y también los sábados en algunas localidades. En días de semana, también hay lapsos de dos o tres horas durante la mañana y durante la tarde en los que esta línea no circula, y cuando lo hace, es cada una hora. En el caso del servicio “Común” hay alrededor de 27 frecuencias de una ciudad a otra, en las 24 horas del día.

Mientras se reactiva la cantidad de usuarios tras la pandemia, la falta de horarios genera problemas ya que algunos no llegan a horario a sus espacios de trabajo o estudio; o bien, la demanda se concentra en menos líneas y más rápidamente colman su capacidad, por lo que -en ocasiones- pasan los colectivos repletos y no paran, dejando pasajeros varados.

¿Cuántos colectivos y choferes hay en la calle? ¿Qué pasó con el personal? ¿Qué cambios hubo en la pandemia y cuáles son los costos de viajar?, son algunas de las consultas que RIO NEGRO intento hacerle a la empresa Ko Ko pero no fue posible establecer contacto con el titular, ya que no hubo respuesta.

“Volvió todo a la normalidad luego de la pandemia, salvo las frecuencias de Koko que son menos”, aseguró otra estudiante de Roca, quien viaja de su ciudad a Cipolletti tres veces por semana. Para hacerlo necesita contar con $7.500 pesos por mes solo para colectivo ya que cuesta 310 pesos el tramo. Contó que entre sus compañeros buscan maneras de abaratar costos como dejar de cursar materias o bien quedarse a dormir en algún lugar para evitar el “ida y vuelta”.

“Viajar todos los días es un desgaste económico, físico y mental. El pasaje en colectivo lo pensás dos veces, ya no es como antes”, lanzó. En cuanto a las frecuencias, contó que hay baches de horas en las que no pasa el “expreso” lo que genera mucha espera.

“Afectan mucho las pocas frecuencias el fin de semana. El expreso prácticamente no existe el finde y los comunes pasan menos”, sentenció.

En este sentido, el servicio de transporte no pareciera adaptarse a los ritmos sociales y regímenes económicos de los habitantes de la región, sino por el contrario, son los usuarios los que se terminan adaptando a la oferta de la empresa, que presta el servicio público.

Otra polémica planteada por los usuarios es la tarjeta. Solo se puede subir con la correspondiente tarjeta SUBE o BusKo, aunque hay unidades que no aceptan estas últimas y sería inminente un reemplazo de la tarjeta de Koko por la nacional, según trascendidos. Además, para recargar saldo en la SUBE hay un costo de servicio que llega a 20 pesos, lo que termina sumando costos para el usuario.

Aumentos frecuentes

Se suma a esto que el servicio público es cada vez más restringido por los elevados costos. Para ir de Cipolletti y Regina, un pasajero necesita contar con 1080 pesos ida y vuelta mínimo, en servicio “Común”, es decir, viajando a estudiar o trabajar de lunes a viernes esa persona debería contar con 5.400 pesos por semana y 21.600 al mes.

Fueron tres los últimos aumentos aprobados y ejecutados en siete meses, con 73 por ciento de incremento acumulado entre los tres tramos: diciembre de 2021 (35%), marzo 2022 (8%) y julio del mismo año (30%). Todos fueron solicitados por la empresa y aprobados por el Ministerio de Obras y Servicios Públicos de la Provincia de Río Negro.

Las constantes subas en el servicio de transporte interurbano elevaron el tono de las críticas entre los usuarios y la necesidad de soluciones ante la imposibilidad de costear trayectos y de organizarse con los horarios.

Evolución de precios

En el servicio de referencia, Común, de Roca a Regina el boleto pasó de $261,84 en marzo a $348,20 en julio. De Roca a Huergo; de $177,25 el boleto a $230,42 en el mes pasado. En tanto, de Roca a Cipolletti pasó de $203,51 a $264,56 actualmente. Y de Roca a Allen costaba $124,20 el pasaje en marzo a $161,46 a partir de julio.

Horarios y frecuencias: ¿Quién regula?

“Dentro de las líneas de transporte provinciales, pospandemia, son muy pocos los horarios que faltan retomar y lo estamos trabajando con la empresa. Es una cuestión de comunicación y de trabajo semanal”, dijo el subsecretario de Transporte de Río Negro, Juan Ignacio Ciancaglini en diálogo con RIO NEGRO.

El funcionario dejó en claro que el accionar de la secretaría, que regula la temática, solo abarca las líneas de transporte provinciales y no aquellas nacionales que cruzan a Neuquén, como es el caso de varios servicios de KoKo y también Pehuenche.

Consultado por este medio, dijo que las frecuencias dependen de la demanda. “A medida que vamos teniendo conocimiento, analizando lo que hace falta, lo que no se restableció, nosotros intimamos a la empresa que lo haga. Son muy pocas las frecuencias de líneas provinciales que faltan”, aclaró y adelantó que la semana próxima mantendrán una reunión con autoridades empresa por este tema puntual.

Para Provincia, las tarifas no alcanzan a cubrir costos

“Las actualizaciones tarifarias son las que corresponden”, dijo Juan Ignacio Ciancaglini, subsecretario de Transporte de la Provincia y agregó que -lo que se autoriza como aumento-, es menos de lo que correspondería por los costos actuales.

“Se está hablando de un costo técnico de $130 o $135 el ingresar al colectivo. Sin embargo sabemos todos que es imposible subir una tarifa a esos valores. Lo que nosotros hacemos es continuamente ir subsidiando a las empresas, no solo con lo que envía el estado nacional”, dijo, que además aseguró que llega con atrasos.

“Estamos muy por debajo de lo que tendría que ser el costo técnico, no solo en Río Negro sino a nivel nacional”, explicó ya que los aumentos “no son acordes a lo que realmente la empresa sin subsidio necesitaría para poder compensar los costos”, dijo.

Además, de a poco, se va volviendo a la demanda de pasajeros prepandemia, pero “aún no se llegó” a esos niveles, postuló el funcionario. Según Ciancaglini, la actividad de transporte atraviesa una profunda crisis por el aumento de los costos que se suma a la quita de subsidios.

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Consultado por el tren, que hace años es promesa en Río Negro, dijo que continuamente hablan de la posibilidad de extenderlo pero “son requerimientos que se pueden hacer en el Estado Nacional y son ellos los que terminan decidiendo”, concluyó.