Abren el salvataje para que otra empresa adquiera la mina de Andacollo
Lo dispuso el juez del concurso para convocar a empresas interesadas. Un empresario de Viedma quiere participar.
El yacimiento metalífero está paralizado desde el 2020. Foto: archivo gentileza Nicolás Fuentes.
El juzgado comercial 23 que tramita en Buenos Aires el concurso de acreedores de Trident Southern Explorations, la empresa que tiene el usufructo de la mina de oro de Andacollo, dispuso la apertura del proceso de «cramdown» o salvataje para que otras firmas adquieran sus cuotas sociales y se hagan cargo de las deudas, como paso previo para evitar la quiebra y el remate de los bienes.
Un empresario de Viedma quiere salvar la mina de Andacollo
El juez subrogante Jorge Sicoli tomó la decisión antes de la feria judicial y dispuso un plazo de cinco días para que se inscriban los acreedores o terceros interesados en participar de ese proceso.
El magistrado tomó los argumentos que dio la propia Trident respecto de que fueron «infructuosas las gestiones realizadas a los fines de la obtención de recursos económicos y de potenciales inversores que permitieran hacer frente a la propuesta concursal». Por ello se evaluó el salvataje como la vía «más favorable a los derechos de los acreedores y trabajadores, máxime si se considera que ya han comparecido interesados en participar del citado procedimiento».
Hasta el momento, una firma llamada Eco Friendly SA, que tiene entre sus socios al empresario de Viedma, Claudio Alberto Ciccarelli, manifestó querer hacerse cargo del proyecto del norte neuquino y, según supo RÍO NEGRO, ya comenzó a pactar reuniones con los trabajadores y la estatal Cormine para negociar su ingreso.
Esta como otras posibles empresas que se inscriban en el registro del salvataje deberán formular propuestas para la adquisición de las cuotas sociales representativas del capital social de Trident y presentar propuestas de acuerdo preventivo con los acreedores.
En números
- $7,2
- millones de pesos por indeminzaciones adeuda a los trabajadores. La firma propuso abonarla en tres cuotas.
El juez dispuso que estas firmas deberán, además, demostrar capacidad técnica adecuada para hacer frente al proyecto, acreditar su solvencia financiera y exteriorizar un plan de negocios que contemple las acciones que efectuarán «para revertir la situación de crisis, reiniciar y normalizar la actividad» en la mina, entre otras exigencias.
El yacimiento metalífero está sin actividad desde el 2020, cuando Trident dejó de pagar los salarios de unos 200 trabajadores y paralizó la producción. Había ganado una licitación por 25 años en el 2016.
Eco Friendly SA, una sociedad constituida el año pasado que ahora aparece como interesada en quedarse con el usufructo de la mina de oro, aseguró en el expediente que está en condiciones de formular propuestas de pago por las deudas pendientes y a ingresar, en diez o 12 meses en «un régimen estable de exploración, explotación y producción» en Andacollo.
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