El avión venezolano-iraní: un caso lleno de preguntas
Alertas que no existieron en el país, el piloto iraní sospechado de pertenecer a un grupo que EE.UU vincula al terrorismo, autopartes que la Volkswagen desconoce y el abogado que defendió a los iraníes y pasó por la Afip.
El avión iraní que pasó por Venezuela, ahora bloqueado en Ezeiza.
Si Uruguay no hubiera emitido una alerta sobre la intención fallida del avión venezolano-iraní de aterrizar en ese país y el ministro de Defensa de Uruguay, Javier García, no hubiera explicado que impidió el aterrizaje porque su gobierno sabía que agencias extranjeras advertían sobre los riesgos sobre esa nave, el Boeing 747-300, matrícula YV3531, de Emtrasur operaba a sus anchas en la Argentina.
De hecho, ya había aterrizado en Córdoba por la niebla y nadie se inmutó. Y luego bajó en Ezeiza con idéntico resultado. Las advertencias de Uruguay sí movilizaron a la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) a retener preventivamente los pasaportes a la tripulación.
Allí comenzaron las preguntas y trascendieron algunas informaciones:
– ¿Qué hacía efectivamente aquí un avión con al menos un integrante de las Fuerzas Quds de la Guardia Revolucionaria Islámica, definida por EE.UU como grupo terrorista (organización que brinda apoyo material a organizaciones terroristas de distintas partes del mundo, sobre todo de Medio Oriente)?.
– Esta nave traía autopartes que se señalaban destinadas a la Volkswagen argentina, pero la automotriz negó tajantemente vínculo con el material, ya que esos instrumentos son fabricados en la Argentina.
– El avión había hecho en mayo un viaje de Paraguay a Aruba, declarando un cargamento de cigarrillos. Había aterrizado en un aeropuerto a escasos kilómetros de Ciudad del Este, en la Triple Frontera con Brasil y Paraguay, considerado paraíso de la piratería y sospechado de foco de grupos integristas.
– El nombre del comandante iraní del avión venezolano, Gholamreza Ghasemi, coincidiría con el de un miembro de la Guardia Revolucionaria y el del administrador de una empresa aérea iraní: Mahan Air. El avión antes pertenecía a Mahan Air, luego pasó a bandera venezolana. Los lazos entre Venezuela e Irán son muy estrechos. El sábado pasado ambos países sellaron una alianza estratégica de 20 años, durante una visita de Nicolás Maduro a Teherán.
– El abogado que presentó el recurso de habeas corpus en favor de los iraníes tripulantes del avión es Rafael Resnick Brenner, un abogado al que se vincula con el Instituto Patria, ex colaborador de Ricardo Echegaray en la AFIP y condenado a inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos por negociaciones incompatibles con su cargo público en la AFIP. Concretamente, se lo condenó por aprobar un plan de pagos ilegal de Ciccone, que le permitía al exvicepresidente Amado Boudou el desembarco en la fábrica de dinero.
– El juez que rechazó el recurso, Federico Villena, primero había resuelto dejar ir a los iraníes al considerar que no había motivo para impedirles la circulación. Pero luego avaló la retención de los pasaportes.
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