¿Qué es la disfonía y por qué la padecemos?
Si pierde la voz demasiado a menudo, es hora de pedir una cita con el médico.
¿Le ha pasado, en ocasiones, que se queda sin voz? La voz es el resultado del sonido que se produce en las cuerdas vocales. Las cuerdas vocales se encuentran ubicadas en la laringe. Cuando queremos emitir un sonido las cuerdas vocales se cierran y el aire contenido en la tráquea y los pulmones hace presión para salir. Cuando lo logra, pasa a través del pequeñísimo espacio que le dejan las cuerdas vocales haciéndolas vibrar. Así se producen los sonidos.
Cualquier alteración anatómica o funcional en este mecanismo dará lugar a cambios en la calidad de la voz, que independientemente de su causa, se denomina “disfonía”. Las causas de disfonía se pueden dividir en dos: funcionales y orgánicas.
Las disfonías funcionales son aquellas en las que las cuerdas vocales se encuentran sanas pero con un funcionamiento deficiente, aparecen por un uso incorrecto de la voz (gritar, chillar, cantar con una técnica inadecuada).
Este tipo de disfonía es muy frecuente en personas que usan su voz para trabajar como locutores, actores, cantantes, maestros, vendedores, guías de turismo o telemarketers. Este tipo de disfonía mejora con un tratamiento que consiste en la reeducación vocal a cargo de la fonoaudióloga.
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Las disfonías orgánicas son aquellas producidas por alguna lesión anatómica sobre las cuerdas vocales. Su origen puede ser inflamatorio, infeccioso, tumores benignos o malignos o la falta de movimiento en una o en las dos cuerdas vocales, entre otros.
El tratamiento de la disfonía dependerá de su causa, para realizar un diagnóstico es imprescindible la observación de las cuerdas vocales en reposo y movimiento a través de una rinofibroscopia o una estroboscopia.
Estos estudios deben ser llevados a cabo por el médico otorrinolaringólogo en toda disfonía a repetición, o en aquellas que se prolonguen por más de 15 días sobre todo en pacientes fumadores.
Para mantener una voz sana podemos adoptar varios hábitos saludables:
– No fumar; el tabaco es una de las principales causas de cáncer de laringe, pulmón, vejiga, boca entre otros.
– Tomar mucha agua y evitar la ingesta de alcohol, para mantener una buena lubricación de las cuerdas vocales.
– Hacer un buen uso vocal, no gritar, no hablar por encima del ruido ambiente o con los auriculares puestos.
– Evitar el carraspeo o la tos repetitiva ya que estos hacen que las cuerdas vocales se muevan bruscamente ocasionando un efecto traumático.
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