Solá vinculó a Moreno con una golpiza a funcionario
El representante del Banco Provincia en el Mercado Central fue agredido y abandonó la función pública
BUENOS AIRES (ABA).- Como un baldazo de agua fría cayó en la Casa Rosada, el reclamo de Felipe Solá demandando la renuncia del secretario de Comercio, Guillermo Moreno, uno de los funcionarios protegidos por el presidente Néstor Kirchner.
«¿Está loco? ¿Qué le pasa? Si quería acompañar a Cristina en la fórmula, con esto se puso las fichas en contra», reveló una alta fuente gubernamental.
Sin embargo, consultado por «Río Negro», Solá señaló: «puedo compartir muchas cosas del control de precios, pero no voy a tolerar la patota, el ninguneo y el autoritarismo».
Reveló que en diciembre pasado, entraron a la oficina de Ricardo Angelucci, director por entonces del Mercado Central por el Banco Provincia, «y le pegaron». Luego el funcionario se alejó de la función. «Esto es inadmisible», expuso Solá.
El gobernador sostuvo más que enojado con Moreno que en el Mercado Central «hay una patota con gente que respondía a (el ex comisario Luis) Patti y a un comisario con prontuario».
El Mercado Central es manejado por un entre tripartito en el que están representados la Nación, la provincia y la ciudad de Buenos Aires.
«Desde hace dos años que la ciudad y la provincia le vienen cediendo a la Nación la presidencia de la entidad, pero no para que hagan lo que quieran y aplique una intervención de hecho. Así no va más», dijo Solá a sus íntimos.
En las ultimas horas, Solá le pidió al dimitente, Angelucci, un informe completo sobre lo que pasa y que pasó en el Mercado Central. Quiere tener un cuadro de situación claro para proceder en consecuencia. Lo apoyan otros integrantes de su elenco gobernante, que indican que no hay que ir contra el productor, sino hacer hincapié en el control de la comercialización de la carne.
Desde el entorno de Solá van más allá y ponen un manto de sospecha sobre el actual titular del Mercado Central, que respondería a Moreno y sobre el que lanzaron sospechas de manejos poco transparentes. «Antes, cuando dependía de la Secretaría General de la Presidencia (a cargo de Oscar Parrilli), todo iba bien, pero desde que el control lo tomó Moreno, está todo mal», dijeron por último desde la Gobernación.
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