Crimen en el supermercado de Bariloche: se entregó el presunto autor
El joven asesinado tenía 23 años. Uno de los puntazos le perforó un pulmón y provocó su muerte. El agresor, de 55 años, huyó tras atacar al muchacho, pero horas después se presentó en una comisaría y quedó detenido a disposición de la justicia.
La violencia se expande como una mancha de aceite. Una discusión que se originó entre dos o tres personas en la fila de un supermercado de Bariloche finalizó con un joven de 23 años asesinado a puñaladas a la salida del comercio. La víctima fue identificada por fuentes judiciales, como Brian Ezequiel Quinchagual y tenía 23 años.
El hombre señalado por los testigos como el autor del homicidio huyó del lugar, pero horas después se entregó voluntariamente a la Policía. Es un hombre de 55 años que permanece detenido a disposición de la justicia. La identidad se mantuvo en reserva.
El crimen ocurrió este sábado pasadas las 13, en la sucursal del supermercado La Anónima, que está ubicada a la altura del kilómetro 4,400 de la avenida de los Pioneros ante la mirada atónita de algunos clientes y personal del comercio.
Las fuentes relataron que, según la información preliminar recolectada, el hombre de 55 años se encontraba en la fila para pagar los artículos que había comprado. La víctima intentó colarse supuestamente, lo que generó la típica discusión que ocurre a veces en los supermercados por ese tipo de situaciones.
Nadie imaginó que era el primer eslabón de un espiral de violencia fatal. La pelea verbal aumentó en intensidad y cruzaron amenazas. Las fuentes dijeron que los clientes salieron enfurecidos y se enfrentaron en el estacionamiento donde habían dejado los vehículos. Allí, hubo una pelea y el agresor sacó un cuchillo que portaba y le dio dos puntazos a Quinchagual. Un puntazo entró en uno de los costales y el otro supuestamente en el cuello de la víctima, que quedó herido de muerte.
El agresor se subió a su vehículo y huyó, mientras el padrastro del joven apuñalado intentaba auxiliarlo y pedía ayuda. La hemorragia provocada por las heridas fue letal. Personal de la comisaría 27, distante a menos de 4 cuadras del lugar, concurrió al supermercado, pero nadie pudo salvarle la vida a Quinchagual.
La Policía convocó al fiscal de turno César Lanfranchi y al equipo de Criminalística. El cuerpo de la víctima fue trasladado en una ambulancia hasta el hospital, pero ya había muerto.
Familiares y amigos del joven apuñalado se presentaron en el lugar y hubo algunos incidentes por el dolor y la conmoción provocada tras enterarse de lo que había sucedido. Por eso, acudieron refuerzos y se dispuso un cordón policial, para que los peritos trabajaran.
El juez de turno dispuso la autopsia que se hizo ayer por la tarde. «La autopsia que determinó que el joven de 23 años sufrió dos heridas descendentes ocasionadas por un arma blanca de las cuales una de ellas le ocasionó la muerte, al momento que perforó la parte superior del pulmón. Una vez finalizada la misma se realizaron los trámites para la entrega del cuerpo a la familia», informaron esta noche de sábado desde el Ministerio Público Fiscal.
Las fuentes comentaron que el agresor se presentó en la comisaría esta tarde de sábado y se puso a disposición de la justicia. Revelaron que se allanó su domicilio, donde secuestraron varios cuchillos y presuntamente armas de fuego. Aunque el arma homicida no fue hallada. Dijeron que la audiencia de formulación de cargos y de control de detención se hará probablemente mañana.
A todo esto, una vez que se retiraron los peritos y el equipo de la fiscalía alrededor de las 16, el supermercado volvió a abrir sus puertas. En estacionamiento, una mancha de sangre de gran dimensión señalaba el sitio exacto de la tragedia.
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