Los problemas que tiene que superar Di Tella si quiere un acuerdo salarial en Cipolletti
Los aumentos siempre estuvieron por debajo de la inflación, pero se lograron reclamos históricos. Elaborar el Convenio Colectivo de Trabajo es el desafío que tiene el Poder Ejecutivo para este 2022.
La conclusión de los referentes gremiales en Cipolletti en relación a los acuerdos paritarios es homogénea: «siempre pierde el trabajador». No importa el color político del gobierno de turno siempre corren detrás de la pelota, aseguran. Pero hay matices, claro.
Mientras los sindicatos esperan una nueva convocatoria por parte del Poder Ejecutivo local, están expectantes al acuerdo provincial que servirá de referencia para llegar a un acuerdo en la ciudad.
Por el momento las partes están lejos, el primer ofrecimiento del Ejecutivo fue del 21% y el reclamo del frente sindical, conformado por ATE, UPCN y Soyem, es del 42%.
La experiencia en la gestión de Claudio Di Tella tiene dos caras. Por un lado se lograron varios reclamos históricos, como el pase a planta de casi 200 empleados, la recategorización de contratados en la categoría 7 a la 10 y el compromiso del intendente de elaborar este año el Convenio Colectivo de Trabajo.
«El año pasado logramos que un pedido de reducción de los años de antigüedad sea a 7 para rendir el pase a planta permanente, el cuál se realizará en el corriente año», destacó Elio Vega, referente de ATE.
Por el otro se encuentra la carrera entre la inflación y los aumentos que siempre están por debajo de la suba de precios. El año pasado la diferencia fue escasa: mientras que la inflación rozó el 51%, el incremento salarial fue del 47,5%. Hay que aclarar que las subas escalonadas son otro escollo para evitar la pérdida adquisitiva de los trabajadores.
En 2020 la diferencia fue mucho más marcada. Fue el año que se desató la pandemia por el coronavirus y que la ciudad perdió millones de pesos por la baja recaudación impositiva. Fueron más de 10 puntos la pérdida por parte de los empleados públicos. La inflación fue del 36,9% y el acuerdo paritario del 26%.
La llegada del oficialismo al municipio cipoleño modificó las negociaciones con los gremios. Es que en la gestión de Aníbal Tortoriello (JxC) entre 2015 y 2019 tuvo la particularidad que se cerraban en los primeros meses del año, incluso hubo un calendario que en diciembre se cerró la paritaria. Generalmente otorgaba los incrementos en un solo pago.
Pero esta política tampoco modificó sustancialmente la relación salario-inflación. Los sindicalistas entienden que el aumento no escalonado era un beneficio a corto plazo, pero que luego no se negociaba y quedaban por debajo de la suba de precios.
En 2019, último año de la gestión del actual diputado nacional, la pérdida del salario estuvo por encima del 8%. Otro dato importante es que los sueldos estatales de Cipolletti son relativamente bajos con respecto a otras ciudades grandes de la provincia.
La llegada de Di Tella volvió a poner en la mesa de las negociaciones a Sitramuci, el gremio comandado por Omar Meza. El secretario General dejó de participar de las paritarias en la gestión Tortoriello luego de un violento reclamo en el edificio municipal en 2017.
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