Una laguna del parque Lanín cambió de color y se ve verde
La laguna Rosales está a solo 6 kilómetros de San Martín de los Andes y su cambio de aspecto generó sorpresa en los últimos días. Un biólogo explicó a RÍO NEGRO el fenómeno.
La laguna Rosales cambió de tonalidad en los últimos días. De su habitual color cristalino, típico de espejos de agua de alta montaña pasó a un color verde que generó sorpresa entre los residentes de San Martín de los Andes y visitantes del parque nacional Lanín.
El fenómeno se originó por un “proceso natural”, según explicó a RÍO NEGRO Nicolás Ferreyra, biólogo y jefe de Conservación del parque Lanín, jurisdicción donde se encuentra la laguna, a solo 6 kilómetros del centro de la ciudad, camino al lago Lolog.
¿Por qué se dio el cambio de color?
Ferreyra señaló que se trata de una conjunción de motivos pero todos de índole natural. “Se trata de una laguna de poca profundidad, que habitualmente no tienen mucho movimiento de agua y como sucede en toda la Patagonia Norte hay muy poca cantidad de agua en los lagos, lagunas, ríos y arroyos, con caudales muy por debajo del promedio”.
El biólogo agregó que a esta situación, que evidencia un nivel de agua bajo de la laguna que incluso deja ver un margen de costa que nunca se vio, “se suman las lluvias de los últimos días que arrastran sedimentos, tierra, ramitas de la montaña y también hay un movimiento en el fondo que acumula sedimentos y restos de algas que hacen que se revuelva el agua y cambie el tono”.
Ferreyra remarcó que habitualmente con las lluvias se arrastran sedimentos hacia el espejo de agua, pero no se evidencian cambios por el caudal habitual de la laguna.
El biólogo señaló que en todos los espejos y cursos de agua de la región se evidencia el bajo caudal como consecuencia de la sequía, la falta de nieve abundante y de lluvias en el otoño e invierno pasado. Incluso hay arroyos que este verano se quedaron sin agua.
El cambio de color generó sorpresa y muchas consultas entre los residentes de San Martín que tienen a la laguna como un paseo habitual por la cercanía de la zona urbana y por su belleza natural. Desde el parque llevaron tranquilidad y descartaron que se vincule el fenómeno a un evento contaminante o externo, simplemente se trata de un proceso natural.
No es la primera vez que ocurre un fenómeno similar
En 2010, en el parque Lanín se dio otro fenómeno natural sorprendente cuando el lago Huechulafquen cambió de color y se puso azul turquesa intenso. Ese tono se prolongó varios meses y llegaron a la zona investigadores de otros lugares para realizar estudios.
En ese momento ocurrió que se produjo una remoción de los sedimentos subterráneos producto de un movimiento telúrico registrado en Chile. El sismo de marzo de 2010 provocó réplicas que se sintieron en las profundidades de este espejo de agua en el parque Lanín.
También en enero de 2011 se evidenció un fenómeno similar en el lago Nahuel Huapi de Bariloche que cambió su color levemente por un temblor en el país vecino.
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