Caen las exportaciones de frutas del Valle, con Rusia como principal destino

Las exportaciones de frutas por el puerto de San Antonio Este (SAE) totalizaron, en estos primeros dos meses del año, las 35.907 toneladas.

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La cifra refleja una caída interanual del 16% y es el volumen más bajo de operaciones que ha tenido el puerto desde el inicio de su historia.

El dato, para muchos de los que están en la actividad, era previsible. El detalle que resalta en esta nueva estadística es que el mercado ruso terminó siendo el principal destino de nuestra oferta exportable de peras y manzanas.

Al cierre de febrero, las colocaciones del Valle destinadas al gigante euroasiático totalizaron poco más de 11.300 toneladas, representando el 32% del total de las ventas externas de ambas especies embarcadas por el puerto de San Antonio Este.

Rusia, en este momento, no es un mercado apetecible para la mayor parte de los países exportadores. Las expectativas de retornos en este destino podrían ser negativas, teniendo en cuenta las sanciones económicas que viene aplicando occidente a consecuencia de la invasión armada rusa sobre Ucrania. Los efectos están comenzando a sentirse en la economía dictada por el Kremlin. Tres claves argumentan este escenario.

-El rublo, mostrando una enorme volatilidad, ayer rozó las 120 unidades por dólar, reflejando una devaluación del 55% en los últimos 30 días. Esto impactará de lleno en los valores que percibirán los exportadores del Valle por la fruta que fue colocada en esas góndolas; a mayor devaluación menos son los dólares que llegarán.

-Problemas con los pagos. Los importadores rusos están adelantando la fata de divisas en su mercado por lo que anticipan problemas en las cadenas con los proveedores, entre los que se encuentran los exportadores argentinos. La salida de Rusia del sistema SWIFT -mecanismo de transacciones internacionales con los países de occidente- sin lugar a duda complicará toso tipo de pagos al exterior. Y esto para el sistema frutícola del Valle significará, como hipótesis de mínima, mayores costos financieros.

-Menos consumo. Analistas estiman que la desaceleración en la economía se espera que comience a asomar en el segundo trimestre del año. Este escenario impactará en el consumo y no hay que descartar que las frutas pierdan demanda a partir de abril, lo que llevaría a una caída de precios en góndola (menos rublos por kilo) la que, sumada a la devaluación de la moneda mencionada párrafos arriba, termina por dar una fórmula preocupante para los exportadores del Valle.

Medidas

Si bien Argentina condenó oficialmente el ingreso de las tropas rusas a Ucrania, todavía no adhirió a las sanciones económicas que está aplicando todo occidente contra ese país.

Desde la cartera de Agricultura de la Nación, una fuente cercana al ministro Julián Domínguez, señaló que “desde el Gobierno no se están analizando ningún tipo de medida restrictiva al comercio bilateral”.  Cabe destacar que las exportaciones de Argentina hacia ese país fueron en 2021 de 680 millones de dólares, lo que marcó un incremento del 11% interanual. Las frutas del Valle representaron cerca del 10% de este valor.

Caída general

Las estadísticas privadas, elaboradas por le terminal portuaria Patagonia Norte SA (TPPN), detallan que las exportaciones hacia ultramar por SAE, en estos dos primeros meses del año, se desplomaron cerca del 80% cuando se las relaciona con la temporada de mayores operaciones, que fue en 2003.

Las principales causas de esta caída hay que centrarlas en los problemas climáticos que sufrió el valle de Río Negro y Neuquén durante gran parte de la primavera pasada. Las heladas tardías sumadas a las tormentas de granizo afectaron sensiblemente los niveles de producción. Los primeros datos oficiales daban cuenta de que unas 300.000 toneladas -entre peras y manzanas- habían sido afectadas en toda la región por este problema; en términos relativos, poco más del 30% respecto de los niveles de cosecha logrados en 2021.

Volviendo a los embarques, el estudio de la TPPN refleja que las exportaciones de peras alcanzaron en este primer bimestre del año poco más de 34.300 toneladas, mostrando un retroceso interanual del 15%. Solo se embarcaron 1.500 toneladas de manzana, un 30% menos respecto del mismo período de 2021.

Todo este escenario se da en un contexto de buenos precios en los principales mercados externos, producto también de una baja global en la producción de frutas.