Un ascensor en el hospital Castro Rendón se trabó con una paciente que salía del quirófano
La nueva falla técnica de los elevadores originó que el personar emitiera un pedido al director del nosocomio. Denuncian que el mal funcionamiento pone en peligro a trabajadores y pacientes.
El funcionamiento de los ascensores en el hospital de mayor complejidad de la provincia de Neuquén continúa siendo un problema recurrente para el personal que presta tareas diarias en ese centro de salud. El último hecho que registró hoy, agotó la paciencia de los y las trabajadoras de salud, quienes decidieron presentar una carta dirigida al director del nosocomio pidiendo la renovación integral de todos los elevadores.
Un camillero que trasladaba a una paciente recién operada, quedó atrapado en uno de los ascensores. Para poder sacar a la persona postrada en la camilla, debieron realizar un improvisado operativo por el hueco del ascensor.
El camillero, Marco Campos y referente de los trabajadores autoconvocados de salud comentó a RÍO NEGRO cómo fue el hecho que le tocó protagonizar en primera persona: “La paciente salió del quirófano, iba para el cuarto piso, que está clínica quirúrgica. Subimos al ascensor, y a mitad del tercer piso, se abren las puertas y se quedan trabadas. Tuve que abrir las puertas manualmente y gritar para que venga alguien a ayudar”, comentó.
Campos comentó que los inconvenientes técnicos con los medios de elevación son parte de la vida cotidiana del hospital. “Todos y todas en el hospital tenemos una experiencia con los ascensores”, agregó.
El representante de los elefantes de salud recordó que una compañera de seguridad estaba en el interior de un ascensor que se descolgó y descendió en caída libre hasta la planta baja. También indicó que el ascensor de Pediatría no funciona y deben subir a los pequeños pacientes en brazos o dejarlos internados en la guardia. “El año pasado tuvimos que pasar una paciente con una tabla rígida para sacarla del ascensor”, añadió. El otro antecedente que recordó Campos fue que del segundo piso de Obstetricia “tuvimos que bajar una paciente de una cesárea de emergencia por un montacargas de verdura de la cocina, porque también se rompieron los ascensores”.
“No es una cuestión de reparar algo que tiene 40 años”, dijo Campos. “Los motores andan mal, los sensores andan mal, entonces cambiar las puertas, por otras más bonitas no cambia la situación”, señaló.
Por su parte, el titular de la junta interna de ATE del Castro Rendón, Jaun Millapán expresó en declaraciones radiales a LU5, que ha sido “bastante complicado” el uso de los elevadores en este último tiempo. Mencionó que hubo un compromiso para arreglar los elevadores y que, a partir de ayer, una nueva empresa comenzó a arreglar los ascensores, pero “siguen funcionando mal”, destacó.
“Esto ya no da para más”, aseveró Millapán. “Estamos poniendo en riesgo a nuestros propios trabajadores y a nuestros pacientes”, sentenció.
El dirigente gremial estimó que si no hay un respuesta concreta y rápida “veremos qué acciones vamos a tomar”.
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