El Frente de Todos rionegrino inicia el verano más caliente en 16 años
La coalición que ganó todos los comicios nacionales desde el 2005 no logró nuevos diputados y las críticas van en aumento. El sorismo se aferra al resultado de Roca y el FG pide “pluralismo”.
Martín y María Emilia Soria, el sábado. El ministro dijo que Berros “militó pueblo por pueblo, acompañando a alguien que no estuvo”.
El Frente de Todos tendrá un fin de año caliente en Río Negro.
El fin de semana pasado hubo reuniones sectoriales, donde se escucharon críticas y pases de factura por la derrota histórica que dejó a la coalición fuera del reparto de bancas de este año en el Congreso de la Nación.
Y dentro ese clima se realizará mañana el demorado encuentro del Consejo del PJ. Será en Sierra Colorada, con una lista de convocados que hasta ayer no tenía confirmaciones plenas.
Por caso, la intendenta de Roca, María Emilia Soria, era una de las incógnitas. La agenda de la mandataria tiene marcada para mañana la asistencia a una actividad de cierre de año con jubilados, organizada por autoridades de Anses.
La jefa comunal y su hermano, Martín Soria, protagonizaron el sábado un encuentro con dirigentes y militantes en la Isla 32 de Roca.
En los discursos de ambos hubo reconocimiento al esfuerzo conjunto para el triunfo en la ciudad, pero el ministro de Justicia de la Nación fue enfático al marcar diferencias internas. Resaltó que el legislador José Luis Berros, segundo en la lista, “puso la cara” en toda la provincia, algo que no ocurrió con la primera candidata, Ana Marks.
Los embates soristas eran esperados por el sector que responde al senador Martín Doñate.
Eso explica el documento emitido el viernes pasado por un grupo de siete intendentes, que cuestionaron la “liviandad” en las acusaciones al dirigente de Luis Beltrán.
“Nunca antes tuvimos tanta receptividad y acompañamiento”, dijeron antes de recordar que los candidatos resultaron de acuerdos internos. Por eso pidieron “levantar la mirada y salir adelante, con más responsabilidad, más apertura, sin dogmatismos”.
Los firmantes de ese posicionamiento fueron Héctor Leineker (Conesa), Claudia Montanaro (Cervantes), David Mendoza (Belisle), Alberto Pacenti (Chichinales), Luis Ivancich (Godoy), Sergio Hernández (Lamarque), y Fabian Pilquinao (Sierra Colorada).
Donde también se escucharon voces críticas fue en Cipolletti, en el marco de un encuentro provincial del Frente Grande.
El partido salió a reclamar “pluralismo”, advirtiendo que este año se notó “la falta de una estrategia política consensuada” dentro del Frente de Todos.
Los integrantes de la Mesa Ejecutiva, el legislador Marcelo Mango, la intendenta de Cinco Saltos, Liliana Alvarado, la exlegisladora Carina Pita y el presidente del partido, Julio Accavallo, fueron los principales protagonistas del cónclave del fin de semana.
Allí se ratificó el respaldo a la gestión de Alberto Fernández, pero al analizar la situación en Río Negro concluyeron que al cuadro general nacional “se le sumó la falta de una estrategia política consensuada en el Frente de Todos respecto a cómo encarar competitivamente la elección de los dos diputados nacionales”.
Desde el FG indicaron que “los hechos históricos demuestran que cuando se garantiza el pluralismo y se construyen consensos se puede lograr el respaldo electoral de las mayorías, este fue el caso del Frente para la Victoria que durante 16 años ganó ininterrumpidamente en la provincia todas las elecciones nacionales que se realizaron en ese período”.
Respecto al futuro de la coalición, plantearon que “en consonancia con lo expresado por el presidente, creemos que la derrota electoral debe servir para que en el Frente de Todos se avance en un acuerdo que contemple un funcionamiento democrático y un mecanismo claro de resolución de conflictos y diferencias”.
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