Paso a paso las claves del caso Videla: «No subás, corré»
Gregorio Colicheo, el único sospechoso, está detenido. Lo acusan también del femicidio de Claudia Casmuz, a quien encontraron enterrada la misma mañana del crimen del empleado judicial.
Con la confirmación de que el cuerpo hallado ayer en Roca es el del trabajador judicial Javier Videla, comienza a cerrarse el círculo sobre uno de los casos más impactantes de los últimos tiempos en la región.
Según los elementos con los que cuenta la fiscalía estos son los elementos trascendentales del caso:
*El 4 de marzo a la 1:20 de la madrugada, Gregorio Colicheo, sospechoso de cometer el crimen, llegó a la vivienda ubicada en Piedrabuena y Las Heras, portando un arma sin autorización.
*Con la excusa de ir a ver un auto (un Chevrolet Agile) que Videla le había encargado que arregle, hizo subir al empleado judicial al vehículo y se fueron.
*A la vuelta, y al percibir que la pareja de Videla, Julio Sánchez, lo observaba por la ventana, Colicheo le tocó bocina para que salga de la vivienda y una vez en el exterior le pidió que se suba al auto.
Según el relato del testigo, desde el interior del vehículo escuchó la voz de Videla que le gritaba «no subás, corré», por lo que decidió huir.
*En ese momento, el imputado efectuó dos disparos contra Sánchez con intención de matarlo, pero él logró ingresar a la vivienda.
*Minutos después, Colicheo se llevó a Videla en el vehículo «ejerciendo violencia física y amenazas con el arma que portaba”.
*Cerca de las 9 de ese mismo 4 de marzo, en el puesto La Perseverancia, a 75 kilómetros de Roca, Colicheo fue detenido con pertenencias de Videla en su poder.
*A unos pocos metros del puesto, esa misma mañana, también hallaron el cuerpo de una mujer enterrado. Se trataba de Claudia Alejandra Casmuz, que tenía un tiro en la cabeza.
*Colicheo está acusado formalmente por el femicidio de Casmuz, además del secuestro y homicidio de Javier Videla y la tentativa de homicidio de Julio Sánchez.
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