Inexplicable aumento del 200% en la factura de agua para un jubilado de Roca
Junto a su esposa, pagaban 1500 pesos por bimestre. Ahora, inesperadamente, les llegan boletas de hasta 8.000 pesos y perciben 24.000 de jubilación. Ya llevaron el reclamo a Defensa del Consumidor y piden una solución a la empresa.
Los reclamos respecto al servicio de agua potable siguen aumentando en la ciudad no sólo por las pérdidas y roturas de la red, sino también por los costos. Con un aumento cercano al 200% en la boleta, un vecino que es jubilado y percibe 24.000 pesos debe dedicarle una tercera parte de sus ingresos para cancelar la factura bimestral.
Liliana Sandoval es vecina de barrio Stefenelli, y según explicó un aumento “erróneo” en la tarifa de agua potable llevó a las autoridades de la empresa ARSA a generar un incremento que afectó de manera importante sus ingresos.
El problema comenzó por el arreglo de una pérdida con rotura del asfalto a fin de año, a unos metros de donde reside, en calle Vinter 486.
“Desde julio empezaron a venir boletas de 4 mil y 8 mil pesos. Antes mi tarifa no superaba los 1500 pesos”, relató Liliana, desesperada por la situación.
El problema con Aguas Rionegrinas (ARSA) surge, en el mes de diciembre, por la rotura de un acueducto que se desbordó y levantó el asfalto frente a la casa de Liliana, sobre Vintter.
En esa obra, la empresa provincial tapó por equivocación el ducto que conecta a la vivienda y le brinda el suministro del recurso potable.
“Nunca se hicieron cargo ni tuvieron consideración con nosotros. Desde ARSA nos dijeron que el medidor estaba roto y que tuvieron que realizar un reemplazo. Nunca estuvo roto, siempre funcionó”, argumentó Liliana, quien aseguró que ellos viven de la jubilación de su esposo que apenas supera los 24.000 pesos por lo que consideró que el incremento era desmedido y no tienen posibilidad de afrontarlo.
Alto consumo
Luego del arreglo realizado por la empresa prestadora del servicio, en el contador de consumo, la tarifa comenzó a llegar con aumentos significativos y de manera progresiva, en perjuicio de su vivienda donde residen tres personas.
“El medidor nuevo parece que marca una barbaridad. Somos tres lo que vivimos acá y no gastamos tanta cantidad de agua. ¿Quién gasta 8 mil pesos de agua por mes? Es una locura pensar ese consumo en una casa particular”, explicó la vecina indignada quien aseguró que llevó adelante distintos reclamos como para tratar de apaciguar el impacto económico que les significa.
En una casa donde la tarifa del recurso natural se abona desde una jubilación de 24 mil pesos, la familia está “angustiada” por los futuros recargos que puedan llegar.
Tratando de buscar alguna solución, Liliana contrató los servicio de un plomero quien realizó la verificación de toda la red y confirmó que no existe ninguna pérdida o filtración en la instalación familia, con lo cual quedó descartada la hipótesis de una “pérdida interna”, tal cual como le habían explicado desde ARSA.
“Me dijeron que ese podía ser uno de los problemas pero nunca vinieron a ver qué pasaba en mica casa”, dijo muy preocupada la mujer.
Tanto la vecina como el resto de su familia iniciaron los reclamos en las oficinas administrativas de la empresa y también ante Defensa del Consumidor, pero hasta el momento no encontraron ninguna respuesta.
“Pagar esa suma con un sueldo de jubilado es muy difícil. Estamos desesperados e indignados porque no sabemos que más hacer”, dijo la vecina mientras mostraba la foto de la última factura que tuvo que cancelar por el supuesto consumo que había tenido en el último bimestre.
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