Cerro Catedral ya comenzó a recibir turistas en la pre temporada invernal
El centro de esquí de Bariloche recibió este lunes cientos de visitantes que disfrutaron de una jornada soleada en la nieve de la base. Son las primeras actividades en ese centro de montaña, que se prepara para arrancar.
Cientos de personas disfrutaron de la nieve que hay en la base del centro de esquí del cerro Catedral. (foto Alfredo Leiva)
Los colores volvieron al cerro Catedral. En la previa de la apertura oficial de la temporada, el centro de esquí recibió a los primeros visitantes que arribaron dispuestos a disfrutar con todo de la nieve que hay en la base. No les importa que el manto blanco sea escaso. Tampoco que sea fabricada con los cañones. Solo quieren divertirse.
Cientos de personas subieron este lunes al cerro Catedral, que comienza a calentar los motores para la apertura oficial de la temporada invernal 2021. Para muchos turistas es la primera vez que tienen contacto con la nieve. Para otros representa el reencuentro con la montaña, porque el invierno pasado no hubo temporada y el turismo estuvo vedado por la pandemia, causada por el nuevo coronavirus.
Abundan los gritos, risas y expresiones de felicidad. Para muchos alcanza con deslizarse sobre un culipatín por la pendiente dando saltos y gritando al viento para que la jornada sea ideal. Otros visitantes aprovechan que hay poca afluencia de personas, para animarse a dar los primeros pasos sobre una tabla de snowboard o un par de esquíes.
La empresa Catedral Alta Patagonia habilitó sectores para esquiadores principiantes en la base, con magic carpet, (Play Park) y algunos medios de elevación para aquellos peatones que querían ascender a la parte alta de la montaña.
Walter Suárez, Cintia y su hijo Lorenzo llegaron a Bariloche procedentes de Mar del Plata. Relatan que están felices de tener unos días de vacaciones en esta ciudad, mientras se preparan para ir hacia la aventura. Es una jornada soleada y no hay mucho frío. Y la energía que transmite la nieve entusiasma a los visitantes que se arrojan sin pausa por las pistas improvisadas en la base del centro de esquí.
“Está hermoso, solo falta más nieve”, destaca Cintia, en el estacionamiento de la base del centro de esquí que está bastante desploblado. “¿Ya a nevar no?”, pregunta, ansioso, Walter. Vinieron por 10 días de vacaciones a desconectarse y descansar. Destacan que los controles sanitarios se hacen. Y opinan que los precios están un poco caros en la ciudad.
Gastón Piña y su esposa Jésica, junto a sus hijos Ulises y Vito, vinieron desde Buenos Aires. “Hace ocho años que no veníamos”, explica el matrimonio. Jésica observa que el centro de Bariloche luce “bastante caído, pero siempre los paisajes son increíbles”.
La familia camina cuesta arriba para tirarse en culipatín. Es una actividad para toda la familia, que está al alcance de la mano. Los nenes están ansiosos por deslizarse y gritar con todas sus fuerzas.
“Es todo muy lindo la verdad”, expresa en voz alta Camila Vidal sentada sobre la nieve con una tabla de snowboard con la que mantuvo una dura pelea hasta hace un rato. Camila es de Monte Grande, Buenos Aires, y es la primera vez que visita esta ciudad. A Camila todo a su alrededor le parece “hermoso y alucinante”. La acompañan Lucia y Micaela Calcagno, Manuel Repetto y Andrés Deveaux. El grupo de amigos hizo un descanso pero se prepara para retomar las clases de la mano de Nico, que es el instructor.
Los jóvenes opinan que los precios están bien. Valoran la gastronomía de Bariloche y que sea variada para todos los gustos.
Es media tarde y en la base del cerro Catedral y la diversión no para. Muchos caen y con esfuerzo se vuelven a levantar. Otros están con la ropa mojada y cansados. Pero nadie se queja. Es el costo del entretenimiento. El sol hace que la jornada sea espectacular. Bariloche comienza a prepararse para la temporada.
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