La resistencia y el acomodamiento

Números que son rionegrinos muertos. En siete días, 107 decesos y, con esta proyección, rondarán 450 en el mes. En mayo fueron 291 y llegaron a 246 en la ola de octubre.

Serán dos meses para resistir. Los contagios seguirán altos hasta fin de mes y para empezar a ceder al concluir julio. Ese crudo diagnóstico fue planteado por Salud en la última reunión del Comité de Crisis.

La gestión provincial se reduce a la administración de las camas disponibles, la compra de medicamentos, la asignación de los elementos, y el cumplimiento de la vacunación.

Los mayores índices de letalidad están en Catriel, Allen y Cipolletti. La mortalidad promedio en Río Negro está en 2,2%: algo más de dos decesos por cada centenar de contagiados (recuperados y activos). En la ciudad petrolera se llega al 5,6% y, entre las valletanas grandes, la media provincial se supera en Allen (3,8%), Fernández Oro (3,6%), Cinco Saltos (3,5%) y Cipolletti (2,5%).

Las terapias intensivas seguirán abarrotadas y los fallecimientos elevados. Sumaron 107 en los siete últimos días y, con esta evolución, se aproximarán a 450 en junio. En mayo fueron 291 y, en la ola de octubre, llegaron a 246. Otro registro fatídico expuesto por el ministro Fabián Zgaib en el Comité: los internados intubados tienen una mortalidad del 75%.

Cifras dolorosas, son rionegrinos muertos.

En ese marco, el gobierno de Arabela Carreras sostuvo el actual cuadro de limitaciones, persistiendo en las iniciales medidas fijadas por Nación, con solapadas flexibilizaciones, como ocurre con los gimnasios y la “práctica recreativa” de deportes, que las prohibe expresamente el decreto nacional en las zonas de alto riesgo. Bariloche, Avellaneda (Valle Medio) y Adolfo Alsina (Viedma) están en ese rango epidemiológico mientras que a Roca (Alto Valle) agravó al estado de “alarma”, según está ratificado en su último informe.

El último informe de riesgo epidemiológico ratificó al Alto Valle en “alarma”. Y Río Negro sigue el esquema de restricciones de Nación, incluso con marcadas flexibilizaciones.

En terreno, los equipos hospitalarios valletanos plantean limitaciones superiores pero los rechazos parten de las autoridades, intranquilas por eventuales insurrecciones de los comerciantes. “No son posibles”, dijo el jefe cipoleño Claudio Di Tella. Se extravió aquel repetido argumento de alinearse con la cotidianidad de Neuquén, pues esa ciudad tiene restringida la circulación y la atención comercial desde las 18 mientras enfrente empieza a las 20, con el permiso al sector gastronómico para llegar a las 23.

Río Negro impone estrictamente una valoración económica entonces habilita o prohíbe según sean juntadas en un ámbito comercial o en otro recreativo-social. Extraña diferenciación viral. Roca hizo su interpretación y llevó esa licencia a los clubes, fundado en los aportes societarios. Esta apertura local es igualmente curiosa porque se origina en el gobierno de María Emilia Soria y desoye el llamado nacional a un riguroso cerramiento.

Así, Carreras y su gabinete se entregan impotentes al avance pandémico, con las ya conocidas limitaciones, y regulan las acciones frente a las presiones sectoriales. Por eso, sólo habrá algún cambio si Nación lo dispone y el viernes deberá resolver cómo seguir a partir del 12 ya que vence su decreto 287.

Cuando aplaque -según las previsiones sanitarias- esta ola del coronavirus, la dirigencia partidaria deberá inscribir sus candidatos. El 25 de julio vencerá ese plazo para las PASO.

Será una campaña recluida por el virus. Esa particularidad exige revisión de discursos y candidatos, ponderando también el nivel de instalación, aceptación y rechazo de la fuerza.

Por eso, son jornadas de encuestas. JSRN concentra tres o cuatro y el FdT tiene las suyas. Existe un inicial interés en la evaluación del gobierno provincial.

Hay coincidencias en los sondeos parapetados por Alberto Weretilneck y la consultora El Almario, convocada por el senador Martín Doñate. Arrojan una aceptación del 38% al 40% para la gestión rionegrina.

Esos relevamientos -que exigirán otro repaso periodístico- alteran ánimos e ideas previas.

Será complejo prever escenarios electorales cuando las voluntades están atravesadas por este presente trágico.