Coronavirus: así se van readecuando las salas del hospital de Bariloche
Hoy todas las camas del hospital, incluso las salas de cuidados mínimos, cuentan con bocas de oxígeno y aire.
“Hoy todas las camas del hospital cuentan con bocas de oxígeno y aire”, señaló Mario Barrilin, coordinador de Servicios Generales del hospital público.
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“Nadie pensó en una pandemia. Es como que sentís que nada alcanza. Todo genera angustia, estrés. El viernes a la tarde, me llamaron del consultorio de respiratorios porque necesitaban dos tubos de oxígeno para pacientes mientras esperaban cama. Y uno piensa: ¿Por qué la gente no se cuida más?”, continuó.
A medida que los contagios de Covid-19 aumentan -y con esa suba, también los casos críticos que requieren internación-, el hospital Ramón Carrillo de Bariloche va readecuando sus espacios, corriendo áreas y ganando lugares para pacientes “Covid”.
Desde la institución insisten en que no se improvisa nada y que todo esta perfectamente estipulado por un plan de contingencia que se elaboró al comienzo de la pandemia y que hoy, se va poniendo en marcha a medida que la demanda lo requiere.
Barrilin destacó la colaboración de Invap desde un principio, en la readecuación de las salas. “Se logró hacer la instalación eléctrica en cada habitación de UCI (Unidad de Cuidados Intermedios). Teníamos una nueva línea pero de esta manera, podemos abastecer de manera independiente a terapia y UCI”, dijo al tiempo que agradeció la colaboración de Daniel Amaya.
Recalcó que tiempo atrás, si se producía un cortocircuito, “se cortaba todo. Ahora cada habitación tiene independientemente su térmica y su disyuntor. Esto es central para los equipos eléctricos (los respiradores y las bombas de infusión)”.
Contó también que, en un primer momento, fue necesario subdividir la UCI para no mezclar a los pacientes con Covid y sin Covid. “Hoy tenemos dos equipos para el sistema de ventilación y climatización. Se instalaron tubos ultravioletas para que recircule el aire. Lo mismo hicimos en el área donde funcionaba Maternidad”, destacó Barrilin.
“Cuando hablo de aislamiento -mencionó-, me refiero a paneles que, en vez de Durlock, son de nylon transparente y grueso, bien sellado por donde no pasa el aire. Y se ponen extractores para que vayan renovando aire de la sala”.
El área de Esterilización, que funcionó históricamente en el primer piso del “edificio viejo”, también fue trasladada ya que en ese espacio, se colocaron seis camas para pacientes Covid. “También ahí se habilitaron paneles de oxígeno, aire y extractores. Se trata de ganar lugares para atender a los pacientes con Covid pero también poder atender otras patologías”, señaló el hombre que lleva 37 años en el hospital Ramón Carrillo.
Por otro lado, se colocaron bocas de oxígeno en todas las camas de la sala de Cuidados Mínimos para mujeres y hombres -para atender los casos más leves- y se la convirtió en una sala mixta. “Invap dispuso unos biombos para que los pacientes tengan algo de intimidad”, dijo.
Por otro lado, la cocina del hospital se trasladó al ejército lo que también implicó un importante trabajo de logística para trasladar las viandas. “Llegaron los hornos nuevos y si bien se requiere remodelar, no podíamos parar”, acotó.
Barrilin aseguró que todas estas modificaciones se planificaron al comienzo de la pandemia. “Las cosas nos van superando día a día. De acuerdo a la cantidad de casos, se van organizando las salas. Lo cierto es que hoy todas las camas cuentan con bocas de oxígeno y aire porque la mayoría de los pacientes que ingresa con Covid necesita oxígeno”.
El trabajo ahora se trasladó al hospital modular donde se están colocando paneles de oxígeno, junto con Invap. “No paramos de hacer cosas”, señaló Barrilin.
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