«Hewitt se recibió de amargo»

Flashes, cámaras, micrófonos, chicos pidiendo autógrafos… De repente, Ezeiza se transformó en un hormiguero de gente rodeando a los héroes de Australia.

David Nalbandian, Guillermo Coria y Alberto Mancini pisaron suelo argentino después de la hazaña en Sydney y el aeropuerto internacional fue una locura.

Nalbandian fue el más buscado por todos y el que tiró lo que la mayoría esperaba escuchar: «Me motivó todo lo que pasó, los insultos a Guillermo (Coria) y Alberto (Mancini). Le quería ganar sí o sí. Hewitt se recibió de amargo».

El «Mago», por su parte, sostuvo que «si hubiera tenido que definir la serie con (Wayne) Arthurs, habría salido a jugar ese partido con todo pero ya después del primer set de David con Hewitt le dije 'volvemos temprano porque esto se cocina rápido'».

En cuanto al futuro inmediato de ambos, Nalbandian descansará en Unquillo unos días y después comenzará a entrenar para encarar la gira norteamericana en cemento con el Masters Series de Montreal, en el inicio, y el US Open como final.

En tanto, Coria viajó a Rosario y antes del fin de semana partirá a Europa para jugar dos torneos en polvo de ladrillo: Kitzbuhel y Sopot.

Por su parte, Mariano Puerta se fue directamente de Australia a Amersfoort, Holanda. El finalista de Roland Garros debutará mañana ante el serbio Janko Tipsarevic.

La dupla integrada por Gastón Etlis y Martín Rodríguez se presentarán en los Estados Unidos donde, también mañana, ante los hermanos tailandeses Sanchai y Sonchat Ratiwatana.