Historias de gente común en la Patagonia
Emilio Di Tata Roitberg editó su nuevo libro, “La Deseada”. Los relatos fueron escritos hace varios años, pero tomaron forma durante la pandemia.
“La Deseada”, el nuevo libro del escritor barilochense Emilio Di Tata Roitberg, contiene cinco historias de vida que transcurren en la Patagonia.
Su autor reconoce que los relatos fueron escritos tres años atrás pero aprovechó el encierro más estricto de la pandemia, para editarlas.
“Es una colección de historias. Una mezcla entre cuentos y novela corta que transcurren en Neuquén, en Bariloche, en Esquel. A diferencia de El Oso y otros libros de corte más bien policial o de suspenso, contemplan otros géneros. Historias de vida de gente a la que le pasan cosas”, describe el autor de Mosquita Muerta, El Oso y González Catán (finalista del certamen Premio Clarín de Novela en 2014).
La historia de un taxista que trabaja de noche o bien, la de una psicóloga que termina conviviendo con alguien que debería ser su paciente con fuertes trastornos mentales forman parte de La Deseada.
“Son historias de personas comunes. Se muestra el mundo de otras personas. El último cuento que da nombre al libro es La Deseada, una estancia en una zona desértica. Todo transcurre alrededor de un hombre de mala reputación, dueño de esa estancia, que se está por morir. Su hijo y su novia llegan para pasar con él sus últimos días.
Di Tata Roitberg reconoce que por lo general, sus historias nacen a partir de alguna anécdota que le comparten. Por eso, la mayoría está basada en hechos reales. “Luego –cuenta– uno las empieza a trabajar. Les doy un giro a medida que las escribo y en general, dejo que se desarrollen”.
Entiende que cada una de estas historias “podría ser novela en sí misma” pero prefirió, en cambio, que sean breves y ágiles. “Que cada lector vaya llenando las partes que desarrollo menos. Es más interesante no contar todo sino dejar que el lector lo elabore un poco”, expresa.
Cuando se lo consulta sobre los escenarios patagónicos de sus historias, admite: “Son los lugares sobre los que me siento más seguro. Por eso, escribo sobre los ambientes que conozco”.
Se siente inspirado por el lugar donde vive y la gente que conoce. “Es duro para vivir y a nivel cultural, uno se pierde algunas cosas. Pero es como el precio que pagamos por vivir en este lugar que queremos”, plantea.
La edición de “La Deseada” llevó un mes y según su autor resulta “un trabajo muy obsesivo”. “Después de la revisión, llega el momento en que uno lo tiene que dejar ir. Soy obsesivo cuando escribo o edito. Una vez que lo imprimí, no leo más. A veces, me pasa que leo algo que escribí hace muchos años y me parece algo escrito por otra persona”, explica.
Considera que la obsesión por la escritura se da “en aquello que está sin terminar o aún en la cabeza”. Luego, la obra ya pasa a ser del público, reflexiona. “Uno debe pensar que la obra es de uno cuando la escribe; después ya no porque pasa a ser de la gente que lee, interpreta. Me ha pasado con algunas novelas, por ejemplo, que mucha gente hace interpretaciones diferentes de lo que escribí”, relata.
La Deseada ya está en venta en Bariloche y a nivel nacional, también se ofrece a través de la plataforma Mercado Libre que, según Di Tata Roitberg, es “un canal de ventas muy bueno”.
En Youtube, además el autor adelanta una de las historias. Lo define como “otro canal de difusión que se acerca al radioteatro”.
Tiempo para editar
Como escritor, Di Tata Roitberg asegura que respeta sus tiempos y jamás se apura por publicar un material. Su metodología predilecta es imprimir algunas versiones y repartirlas entre amigos para recoger opiniones.
“A veces, en base a esto, modifico algunas cosas pero creo que el tiempo es el mejor editor. González Catán y Rafael los publiqué con muy poco tiempo pero fueron excepciones”, advierte.
“La pandemia no me afectó tanto. Tengo otro trabajo que no dejé nunca. Soy trabajador esencial, con horario reducido pero no corté en ningún momento”, señaló.
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