Quartararo confía en su equipo para pelear el título en MotoGP

Entre las situaciones que modificaron el rumbo de la Yamaha de Fabio Quartararo en el presente 2020 del Mundial de MotoGP están los inconvenientes que todas las motos de Iwata mostraron, pero el líder del certamen se mantiene tranquilo y espera confiada la próxima fecha que se disputará el domingo en eol circuito de Misiano.

Quartararo, a pesar de la pobre tarea en la última prueba del Mundial, está efocado y confiado en el equipo, ratificando que seguirá con su estrategia para intentar conquistar el título.

“Estoy convencido de que seremos fuertes si Yamaha nos da una respuesta importante”, destacó el Diablo Quartararo en la previa a una nueva prueba del Mundial, donde sus principales rivales están cada vez más cerca en el certamen.

La imagen de Maverick Viñales arrojándose de una moto sin frenos a 220 kilómetros por hora es una de las más difíciles de asimilar después del paso por Spielberg.

El ritmo que otros usuarios de la marca lograron sostener no fue bueno, aunque sin llegar al límite de Viñales, y oportunamente se brindó una explicación de parte del fabricante de la pieza en cuestión.

“No sólo luchamos con los frenos, sino que también tuvimos problemas en muchas otras áreas”, remarca Quartararo al ser consultado.

El joven piloto aseguró que “Yamaha tiene mucho trabajo que hacer, en este momento la situación no es fácil”.

Si a esta situación se le suma el rendimiento de las KTM con dos victorias en el año, el ritmo que las Suzuki mostró en diferentes pistas y la creciente figura de los pilotos de Ducati, nada está sencillo. Solamente la crisis de Honda, sin podios en lo que va del año e inmersos en la peor crisis de resultados de su historia desde el regreso como equipo oficial en 1982 y la ausencia de Marc Márquez, pone paños fríos a la mirada de Yamaha.

Quartararo reconoció que “aprendí del pasado. No importa cuántas veces la gente diga que tienes que ganar, que tienes que ser el primero, que tienes que ganar el título… Yo conozco mis objetivos y sólo yo conozco nuestro potencial. Discutimos juntos, como equipo, lo que somos capaces de hacer. Ndie más que mi equipo puede indicarme qué hacer”.