Extienden la preventiva para los policías imputados por homicidio agravado
Será en sus domicilios y por espacio de cuatro meses. El fiscal jefe Hernán Trejo explicó las medidas que todavía están pendiente, mientras que Damián Torres asumió la defensa de los uniformados.
Se realizó una nueva audiencia por el asesinato de Olivera. Foto: Marcelo Ochoa.
La Justicia extendió este viernes a cuatro meses la prisión domiciliaria de los policías Wilfredo Cabrera y Laureano Sayhueque imputados el miércoles como coautores de homicidio agravado, en un hecho que continúa con muchos interrogantes y pocas certezas.
El pasado lunes una persecución policial terminó con la muerte de Hernán Olivera y la detención de los dos policías de la Brigada Rural de Viedma, uno de ellos con una herida leve de arma blanca.
La audiencia, donde se aprobó la extensión de la medida cautelar fue presidida por el juez de garantías Favio Corvalán, con las presencias del fiscal jefe, Hernán Trejo; y la fiscal Mariela Coy, mientras que la defensa de los imputados fue asumida por el abogado particular Damián Torres.
Cabrera y Sayhueque fueron detenidos a las pocas horas del hecho, luego se les impuso la domiciliaria por 72 horas y ahora se fijó esta extensión por el mismo tiempo que dure la investigación a cargo de una comisión especial que integran Trejo, Coy y Paula de Luque, además de los equipos técnicos de la Procuración General.
Durante la audiencia Trejo volvió a basar el pedido de prisión preventiva “porque los imputados podrían interferir en el éxito de la investigación” y aclaró que los agentes abandonaron el lugar en el que sucedieron los hechos, considerando ello de gravedad “en un caso en el cual no puede haber margen de error”.
El fiscal jefe anticipó que “tenemos por delante 26 personas a quien tomarle declaración, pruebas pendientes que demoran no menos de 90 días, eventual ADN y otras pericias sobre los vehículos, la ropa y la víctima”. Por su parte, Torres adelantó que su teoría del caso “será otra”.
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