Roca saturada ante el covid: terapias al 100% y hoteles desactivados
El hospital y las clínicas quedaron ayer sin camas para cuadros graves. El aumento de contagios y la falta de personal impuso la internación domiciliaria para casos leves.
El hotel Huemul dejó de recibir pacientes con cuadros leves. Las personas que estaban allí fueron enviadas a sus domicilios.
La capacidad de respuesta del sistema sanitario de Roca ante los casos de covid-19 llegó a un límite. Ayer hubo preocupación en ámbitos médicos, porque durante la noche del martes quedaron saturadas las camas de terapia intensiva del hospital público y de las dos clínicas privadas de la ciudad.
La información fue confirmada por profesionales de ambos sectores, detallando que en el López Lima las 13 unidades disponibles estaban ocupadas por personas con coronavirus.
Mientras tanto, en el hospital de Allen estaban también colmadas las cuatro camas habilitadas días atrás para pacientes “no covid”, según lo informado en la conferencia del martes por la secretaria de Salud de la provincia, Mercedes Iberó.
El presente con mínimo margen de maniobra en Roca también se configura por otro hecho ocurrido en las últimas horas: la internación domiciliaria de aquellos vecinos con diagnóstico positivo pero con síntomas leves.
Con el cambio de criterios adoptado por Nación y la adhesión posterior del gobierno provincial, ahora no habrá más alojamiento obligatorio en centros del Estado u hoteles contratados por el gobierno, sino que muchos procesos de enfermedad podrán continuarse en los domicilios particulares.
Lo que llamó la atención fue la desocupación masiva de lugares que hasta el fin de semana pasado estaban llenos, sobre todo teniendo en cuenta las pautas formales que deben regir para avalar una internación domiciliaria.
Más allá de eso, lo concreto es que las nuevas reglas aprobadas por el Ministerio de Salud de la provincia ofrecieron margen de maniobra ante el aumento significativo de casos registrado durante agosto y la escasa disponibilidad de personal de salud para atender a esas personas.
Pero nada de eso es posible con los casos graves y durante la noche del martes se encendieron las alarmas entre los médicos intensivistas de Roca.
“Es verdad. Anoche no había camas y hoy la situación sigue parecida”, respondió una fuente del sistema público hoy por la tarde, ante una consulta de RÍO NEGRO.
Desde el Sanatorio Juan XXIII ratificaron el escenario. “Sí, al menos en el sanatorio, todos estos días estamos con la capacidad operativa a pleno en UTI. Si bien la situación es variable, día a día, en términos generales, no tenemos capacidad disponible. Cuando ello ocurre, es muy transitorio, se vuelve a completar en un cortísimo lapso de tiempo”, describieron desde la institución.
Por su parte, desde la Clínica Roca detallaron que a la 1 de la madrugada de ayer el servicio de Terapia Intensiva quedó colmado, aunque durante la misma mañana se liberó un lugar.
En Roca ayer había 13 camas de UTI en el hospital, 13 en la Clínica Roca y 21 en el Juan XXIII, aunque no todas esas unidades estaban disponibles todo el tiempo. La falta de personal -por contagios, licencias psicológicas o escasez de recursos constante en algunas especialidades- hace muy difícil mantenerlas activas al 100% y eso reduce aún más la capacidad de respuesta en medio de la pandemia.
Aislados
- 972
- roquenses permanecían en sus hogares hasta este miércoles por la mañana.
- 242
- casos activos de covid tenía Roca hasta la mitad de esta semana.
La internación domiciliaria de los pacientes con cuadros leves fue la salida que encontró el gobierno rionegrino ante el complejo escenario que se presentó por el importante aumento de casos de covid-19 registrado en agosto, en simultáneo con el estrés de los equipos de salud.
¿Pero cualquier persona está en condiciones de ingresar a ese esquema sin convertirse en un potencial factor de riesgo de nuevos contagios?
La “Guía para el Monitoreo de Casos Domiciliarios” que recibieron los equipos de salud de la provincia el jueves pasado detalla claramente las pautas que debe cumplir un paciente en esa condición.
Entre las más importantes están las siguientes:
· Permanecer en un espacio o habitación de uso individual. La puerta de la habitación debe permanecer cerrada hasta la finalización del aislamiento y debe mantenerse una adecuada ventilación.
· Abstenerse de mantener relaciones sexuales con su pareja/conviviente el tiempo que dure la indicación de internación domiciliaria.
· No salir de la habitación en ninguna circunstancia, con excepción del uso del baño o una condición de urgencia (deterioro de la salud o compromiso de la vida).
· El paciente deberá utilizar barbijo quirúrgico en caso de ir al baño y podrá reutilizarlo si el mismo no se moja o se mancha con secreciones. Luego del retirar el barbijo deberá higienizarse las manos con solución hidroalcohólica.
· La persona enferma no debe recibir visitas durante el periodo de aislamiento, excepto para eventuales controles de salud.
· En la habitación deberá colocarse un contenedor de residuos con bolsa y colocar una segunda al retirarla de la habitación.
Sin dudas, el nuevo esquema representa un enorme desafío para los equipos de vigilancia epidemiológica.
Los primeros resultados de la experiencia comenzarán a verse en 14 días, cuando se sepa si aumentan, se mantienen o bajan los contagios y se conozca si se trata de contactos estrechos de personas que esta semana regresaron a sus hogares.
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