Filme sobre Hitler enfrenta a historiadores alemanes

HAMBURGO, (DPA).- El estreno de la película «Der Untergang» («El hundimiento»), la primera producción del cine alemán en la que se retrata la dimensión humana y cotidiana del dictador Adolf Hitler durante los últimos días de la Segunda Guerra Mundial, ha provocado el enfrentamiento de los historiadores del país.

La película, dirigida por Oliver Hirschgiebel y que tiene como genial protagonista al actor Bruno Ganz, fue presentada en una función especial para los asistentes al congreso nacional de historiadores que se celebró en Kiel, apenas pocas horas antes de su estreno oficial para el público.

Las reacciones fueron dispares, alabándose sin embargo con cierta unanimidad el meticuloso cuidado de los detalles históricos de los hechos que sucedieron en los últimos doce días en la vida de Hitler, encerrado en su búnker de Berlín cuando afuera la ciudad y el país entero se desmembraba.

Sin embargo, el historiador Hans Mommsen advirtió que «la mera reconstrucción verídica de detalles no significa un análisis profundo de la historia». Para Mommsen, con el esfuerzo de mostrar a Hitler como el ser humano que fue, no se llega a entender la dimensión del fenómeno del nazismo, los orígenes de la dictadura ni los motivos que llevaron a la estabilidad de la tiranía.

«Reducir la historia a determinados individuos es un camino equivocado y fatal», alertó Mommsen, que critica que «los medios en general tienen la tendencia de mostrar historia sin la debida interpretación», aunque «esta película tiene la ventaja de que la gente podrá ver que Hitler fue un tipo mediocre».

El historiador Hermann Graml disiente por completo con la interpretación de su colega y considera que la película «es excelente», porque permite palpar la locura, la espantosa comicidad y la normalidad del régimen. «Para muchos espectadores, el filme ofrece una buena oportunidad para entender la esencia del régimen nazi».

Otro historiador que terció en el debate que se suscitó después de la función especial de Kiel fue Christian Hartmann, del Instituto de Historia Contemporánea de Munich, al considerar que «hay producciones que explotan a la historia y otras que se someten a ella».

Esta «se concentra en la reproducción detallista de la época y sus personajes», constató.