Advierten un incremento de la pesca furtiva en Neuquén
Guardafaunas de Neuquén trabajaron con la Policía e inspectores de tránsito para confiscar presas que venían en viaje por las Rutas de la provincia.
En un fin de semana con mucho movimiento en la zona lacustre, los cuerpos de Guardafaunas de Neuquén confiscaron más de 20 pescados que fueron sacrificados en distintos espejos de agua de la provincia. Advirtieron un incremento en la actividad furtiva y señalaron que la temporada de pesca aún no está habilitada.
Pese a que el reglamento de pesca es muy específico respecto a las fechas, los lugares habilitados y las especies que pueden ser sacrificadas, los aficionados a la pesca no parecen respetar la normativa vigente. Este fin de semana se labraron entre 25 y 30 actas a infractores que fueron detenidos con presas que arrojaron en promedio 4,5 kilos cada una.
Desde el cuerpo de Guardafaunas, el director de la Regional Este, Diego Moreno, explicó que la mayor parte de los secuestros se dieron en proximidades a El Chocón, en Arroyito y en Piedra del Águila, donde se montaron operativos con personal de Policía provincial e inspectores de tránsito municipales.
«En su mayoría venían de la zona lacustre. El problema es que el sacrificio está prohibido hasta el primero de diciembre porque los animales en estos días están desovando y esto perjudica la reproducción. Además hay sitios donde está restringido totalmente el sacrificio de los peces», explicó. Agregó que los animales que incautaron fueron truchas arcoiris, pejerreyes y percas. También mencionaron que el domingo por la noche, personal de la Policía de Tránsito secuestró a un conductor en la báscula de camiones de Senillosa un aire comprimido y una liebre muerta.
El funcionario detalló que en todos los casos se aplicaron multas y que los infractores tienen un plazo de cinco días para hacer el descargo en el Juzgado de Faltas, luego el juez definirá y comunicará las sanciones en un plazo máximo de tres meses. Agregó que en algunos casos se secuestraron además de las piezas sacrificadas, los equipos de pesca de los infractores.
Además de los secuestros, en Neuquén capital el cuerpo de guardafaunas tuvo algunos trabajos adicionales. Ayer por la tarde, procedieron al secuestro de un lagarto overo de alrededor de 50 centímetros de largo, que fue denunciado por un vecino del oeste de la ciudad, quien accedió a su entrega voluntaria. Moreno describió que se trata de una especie común en los límites interprovinciales de Río Negro y la Pampa, y que habitualmente son trasladados en cautiverio hasta esta zona.
Se trata de un «animal inofensivo si no se lo molesta. Consume huevos y algunos roedores». Además rescataron dos aguiluchos en la zona céntrica de la ciudad, uno de ellos apareció con un ala quebrada que fueron puestos a resguardo de un veterinario.
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