Congelamiento de Combustibles: el plan B de Neuquén
El gobernador llevará a la reunión del martes una propuesta de escalonamiento. Buscan repartir los costos del congelamiento en los surtidores. Reiteró que acuerda con la suspensión de aumentos para naftas, pero insiste en buscar otros mecanismos de financiamiento que no afecten a Vaca Muerta.
El derrotero de idas y vueltas en el que se transformaron las medidas anunciadas por el gobierno nacional tras la abultada derrota en las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) parece que tendrá nuevos capítulos. El congelamiento de los combustibles, que trasladó el costo exclusivamente a las provincias y las empresas productoras de crudo, se revisará el próximo martes en Buenos Aires.
El gobernador de Neuquén, Omar Gutiérrez, apuesta a que el decreto 566/19 quede sin efecto. No porque no acuerde con la medida de aliviar los castigados bolsillos de los argentinos, sino porque el costo de la medida castiga las regalías y afecta los proyectos y la credibilidad en Vaca Muerta.
La propuesta que llevará el gobierno neuquino a la reunión del martes a las 17 será un sendero de precios gradual para empalmar nuevamente con el valor internacional del petróleo y la cotización oficial del dólar. El decreto fijó el barril en 59 dólares y el tipo de cambio en 45,19 pesos, creando lo que llamaron “el dólar petrolero”.
La discusión final sobre el tema es quién se hacer cargo del costo de una medida de carácter social. Para la provincia deben buscarse mecanismos con herramientas impositivas o financieras para evitar nuevos sacudones en la confianza de los inversores. Incluso trabajan en la propuesta de la creación de un fondo anticíclico que sirva de amortiguador en este tipo de situaciones.
La provincia tiene 30 días para negociar una modificación del DNU porque consiguió liquidar las regalías de julio con un dólar alto y sin el techo al barril.
Los cambios al esquema impositivo de los combustibles, oficializado en marzo de 2018, buscaba ser ese “acordeón” que evitara sacudones en los bolsillos de los usuarios. Sin embargo, no se utilizó, creen, por el acuerdo fiscal con el FMI.
El gobierno provincial anticipó que trabajará con paciencia pues tienen un mes para destrabar las consecuencias del congelamiento en los surtidores.
El gobernador consiguió, la semana pasada, postergar la firma del DNU por lo que las regalías de este mes no quedaron alcanzadas por la medida e incluso tendrán un salto positivo ya que se liquidaron al tipo de cambio del 14, el día de mayor suba para la moneda norteamericana: 62,50 pesos.
En números
- u$s 700
- millones es la pérdida que estiman las petroleras para los próximos tres meses por la medida del gobierno nacional.
- 25%
- es el atraso que arrastran los combustibles por subas frenadas y por los efectos de la devaluación pos PASO.
El sendero de recuperación de precios, en teoría, se parece al que el exministro de Energía, Juan José Aranguren, utilizó a la inversa para liberar el mercado de los combustibles. Entonces existía el “barril criollo” un precio artificial, por encima del valor internacional, que se utilizó para evitar una caída en la actividad petrolera.
Con los meses se buscó una convergencia hasta que se equilibraron los precios y el mercado quedó atado a la cotización internacional. En los hechos, el libre mercado, nunca funcionó porque el gobierno nacional intervino a través de YPF para contener subas abultadas en las estaciones que pudieran acelerar más la inflación.
En este caso, concretamente, se busca un decreto rectificatorio que sostenga el congelamiento pero que gradualmente se acerque al precio liberado, lo que podría incluir algunas subas mínimas para evitar que el día 91, cuando vence el DNU, las empresas hagan un abrupto traslado de los precios atrasados.
En los últimos días las compañías no integradas, las que solo extraen hidrocarburos, salieron a expresar su preocupación por la medida de Nación al asegurar que la suba de costos en pesos y el congelamiento del valor del barril las deja fuera de rango. Advirtieron que para poder transitar los 90 días de la medida debería posponer proyectos y desacelerar sus desarrollo afectando niveles de producción y puestos de empleo.
Ayer circuló que al menos dos compañías del sector decidieron poner en marcha un plan de ajustes en los campos donde tienen desarrollos petroleros. Trascendió que las firmas Vista Oil & Gas, que conduce Miguel Galuccio, y Tecpetrol, del gigante Techint, habrían iniciado los recortes con la baja de un equipo de perforación cada uno. Los sindicatos convocaron a reunión el martes.
Apoyo de Mosconi
El instituto Mosconi, liderado por exsecretarios de energía, emitió un enfático documento de apoyo a la decisión del presidente Mauricio Macri. Aseguró que no se afectan los desarrollo en Vaca Muerta ya que solo representan el 18% del crudo del país. Las compañías indicaron que con el valor interno del crudo no resulta económico extraer petróleo no convencional.
En la industria petrolera tomaron con sorpresa la medida, pero lo más complejo de explicar a sus accionistas es lo que llamaron “el dólar petrolero”. El decreto del presidente Mauricio Macri crea artificialmente una nueva cotización oficial para la divisa (45,19 pesos) y deja en el mercado dos tipo de cambio.
Con esa referencia y el tope para el valor del barril, menos las retenciones por exportación, el crudo se paga en el país poco menos de 43 dólares. Es decir 15 dólares menos que en la cotización oficial. Sobre este punto hay una especial atención del gobierno neuquino porque entienden que existe un trato discriminatorio con el resto de las economías dolarizadas que tienen el tipo de cambio oficial para calcular sus ingresos.
Comentarios