La Sinfónica Patagonia, el puente de Bariloche con Europa

No bien terminó una producción de ópera en Suiza con la participación de 60 músicos, entre los que había 9 pasantes de la Sinfónica Patagonia, Facundo Agudín abandonó el escenario y tomó un avión rumbo a Albania donde tenía previsto una dirección.

Otro avión lo trajo a Bariloche ya que volverá a dirigir los conciertos anuales de la Sinfónica Patagonia de la Universidad Nacional de Río Negro.

Luego, habrá que regresar a Suiza por una serie de conciertos y semanas después, volverá a pisar suelo argentino para participar de un homenaje a Cortázar.

“La gente más ocupada es la que más tiempo tiene”, dice risueño este hombre de 47 años que reside en Suiza desde 1996 pero constantemente, realiza presentaciones y proyectos en Argentina.

“¿Cómo se hace para complementar todas las actividades viviendo en el exterior?”, pregunta Río Negro. “No se, responde el músico, pero funciona”. Se ríe.

Agudín recibirá el premio Konex como uno de los cinco directores de Orquesta más influyentes de la década.

“Me siento honrado, feliz por este premio. Me pone muy contento que entre esos 5 directores haya colegas que quiero mucho y de gran talento, como Alejo Perez. Los dos trabajamos afuera sin parar. También es importante en la perspectiva del programa Sinfónica Patagonia y espero que le agregue impulso”, añade.

Una década

La Sinfónica Patagonia, el programa de formación en práctica orquestal de la Universidad Nacional de Río Negro, que dirige Agudín, cumple su décimo aniversario, con 80 músicos.

La cita para disfrutar de los conciertos es el viernes a las 20 en el Salón de Usos Múltiples de Dina Huapi y el sábado, también a las 20, en el colegio Don Bosco. La entrada es libre y gratuita.

“A partir de la fundación de la orquesta en julio del 2009, la actividad del programa fue ininterrumpida. Cada año, alternamos ciclos de audiciones, con sesiones de trabajo de la orquesta y presentaciones públicas”, puntualiza Agudín y agrega: “Logramos el objetivo: construir un puente con Europa y las posibilidades de apertura de nuestros músicos”.

En lo que va del 2019, asegura que ya hay 9 músicos integrantes de la orquesta que “han hecho pasantías profesionales en una producción de ópera en Suiza”.

A la vez, la Sinfónica Patagonia tiene 16 músicos perfeccionándose en Europa cuya evolución es monitoreada por Agudín “de cerca”.

“Muchos músicos han regresado al país y enseñan en Río Negro. Otros volverán; otros no. Pero estoy seguro que hemos trabajado en una óptica de excelencia. El nivel musical evolucionó mucho y además, saludo los emprendimientos orquestales que han nacido en la provincia a partir de esto. En el 2009 no había mucho”, señala.

Agudín pone como ejemplo a Juan Martín Sarmiento, de Cinco Saltos, que llegó a la Sinfónica Patagonia cuando tenía tan solo 16 años, apenas una década atrás. Hoy, también es solista de oboe en la Sinfónica de Santa Fe.

“Vino a tocar también con nuestra orquesta en Suiza. La Orquesta Sinfónica es eso: una gran dinamizadora”, expresa con tanto orgullo como entusiasmo.

En su último paso por Bariloche, Agudín también dictó una Masterclass de dirección para jóvenes directores en carrera y estudiantes.

“Seleccionamos a ocho candidatos (cuatro de Bariloche, una de Alemania y tres de Buenos Aires) que fueron directores activos de nuestra orquesta. Por eso, decimos que la Sinfónica Patagonia sirve de plataforma de entrenamiento para directores jóvenes. En la formación de un director es importantísimo tener una orquesta real. Es un trampolín importante”.

Extensión Universitaria

El Programa de Formación en Práctica Orquestal forma parte de las actividades de extensión universitaria que promueve la UNRN.

El programa está destinado a estudiantes de música de nivel avanzado y medio de institutos, escuelas de música y conservatorios de Río Negro.

Con más de 24 conciertos, con entrada libre en teatros, iglesias y polideportivos de la provincia y Buenos Aires, la Sinfónica se ha transformado un factor de integración cultural mayor.

La última presentación se realizó en septiembre del 2016 en el Centro Cultural Néstor Kirchner (CCK) de la Ciudad de Buenos Aires.

“Mores Redux”, del argentino Pablo Ortíz, abre los conciertos para celebrar la primera década de la Sinfónica Patagonia.

Reúne versiones de El Firulete, Gricel y Taquito militar.

La segunda parte del programa incluye “Scheherazade”, del compositor ruso Nikolai Rimsky Korsakov, estrenada en 1888 que interpreta los cuentos árabes clásicos de “Las mil y una noches”.