Lo declararon culpable por abusar de su sobrina en Neuquén
El sujeto cometió los abusos entre 2009 y 2011 cuando quedaba al cuidado de la niña. Ya había sido declarado responsable por el mismo caso en 2018, pero la resolución fue impugnada y por orden del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) el juicio se volvió a hacer.
Un tribunal colegiado declaró a un hombre, cuyas siglas son J.C.D.T, como autor penalmente responsable por abusar sexualmente de su sobrina en la ciudad de Neuquén.
El caso ya había sido juzgado en septiembre de 2018 y el imputado ya había sido declarado responsable por el hecho, como la defensa impugnó la realización de aquel debate, el Tribunal de Impugnación le dio intervención al Tribunal Superior de Justicia (TSJ). El máximo órgano de la justicia provincial resolvió enviar el caso para reenvío por lo que debió ser nuevamente juzgado.
El delito por el cual el fiscal Andrés Azar solicitó la responsabilidad penal del acusado en el alegato de clausura al juicio es abuso sexual gravemente ultrajante continuado en concurso real con abuso sexual con acceso carnal, todo en carácter de autor y doblemente agravado, por la condición de guarda y por el vínculo (afín en línea directa).
Debido a que la expectativa de pena para los delitos por los que se juzgaron al imputado excede los 3 años de prisión, intervino un Tribunal Colegiado. En los próximos días la Oficina Judicial deberá fijar la fecha para la realización de una audiencia donde se determinará el monto de pena que el imputado deberá cumplir.
La teoría que sostuvo la fiscalía durante el debate y que avalaron los jueces del tribunal encargado de juzgar el caso fue que durante el periodo transcurrido entre el 21 de marzo de 2009 y el 21 de marzo de 2011, J.C.D.T, abusó sexualmente de su sobrina en un número indeterminado de veces en el domicilio donde la víctima convivía con sus padres ubicado contiguo al del imputado, de la ciudad de Neuquén.
Para cometer los abusos el acusado aprovechaba los momentos en que la niña se encontraba a su cuidado mientras los padres se ausentaban del hogar para ir a trabajar. Los hechos comenzaron de manera simple, complejizándose cada vez más la actividad sexual que desplegaba el imputado.
La defensora de los derechos del niño y el adolescente Andrea Rapazzo, que intervino como querellante en representación de la víctima había adherido a la descripción de los hechos y la calificación legal expuestos por el fiscal Azar.
Durante el juicio que demandó cuatro jornadas se recibieron diversos testimonios entre los cuales se encontraron los de la de la víctima y la de su madre, entre otros.
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