A dos años de recibir el balazo, Barreiro revivió cómo fue el ataque
“Sentí un golpe fuerte en el pecho y me fui para atrás”, dijo el docente sobre cómo fue el dramático momento.
Neuquén
Hace dos años Rodrigo Barreiro (35 años) recibió un tiro compatible con una posta de plomo de cartucho 12/70, que ingresó por el torso derecho y se alojó a la altura del pulmón. Fue en la represión policial contra una manifestación en la Legislatura mientras se trataba el acuerdo entre YPF y la provincia de Neuquén, que permitió el desembarco de Chevron. La justicia no determinó aún quién disparó.
“Yo sentí un golpe fuerte en el pecho, como que te pegan una patada, y me fui para atrás”, contó Barreiro, profesor de Historia, sobre el disparo. Ese día había ido con un grupo de alumnos a los que llevó en su auto. Se sumó a la marcha.
“Veníamos tomando mate por Leloir, hablando, llegamos a la calle Castro Rendón, vi un compañero de colegio, cuando iba a cruzar le dejé mi mate a otro compañero, crucé, y ahí vi que volaron los primeros gases”, precisó.
Agregó: “de golpe y porrazo empezó a armarse un revuelo.” Se alejó y pasado el mediodía volvió a la zona porque “parecía que se había calmado”.
“Nos subimos a un morro de la Ciudad Judicial donde había personas de pueblos originarios”, aclaró. Vino el impacto. “Enseguida sentí sangre y un sabor raro en la boca. Me ayudaron a caminar, me costaba dar unos pasos. Escupí sangre”, describió. Lo trasladaron en auto hasta el hospital regional. “Cuando llegué y me acosté, no pude respirar”, recordó.
En la fundación Favaloro fue donde le dijeron: “Ni se te ocurra tocar el proyectil.”
En la investigación no ha habido avance sobre los autores. “Me genera sorpresa, no tanto por la situación en sí, sino por los comentarios de la gente. La mayoría te dice: ‘No va a pasar nada’. Pareciera que hay cosas que para nuestra sociedad o para la Justicia tienen cierto límite”, aseguró.
Sus abogados sostienen que el proyectil provino de personal policial. Para la fiscalía, que desestimó acusar a los jefes policiales del operativo por incumplimiento de funciones, hay un esfuerzo de la querella por direccionar la investigación hacia la policía. El control de la decisión fiscal será revisado por la jueza María Gagliano en una audiencia prevista para el 7 de octubre.
Pablo Gutiérrez, abogado querellante, planteó: “Jamás tuvimos una visión parcial. Nos centramos en las responsabilidades funcionales porque toda la prueba indica que el disparo viene de la policía, del cordón que estaba ubicado sobre Leloir”.
Agencia Neuquén.-
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