Adopción: los chicos que esperan una familia tienen entre 7 y 13 años

En lo que va del año se concretaron entre 10 y 12 adopciones en la Cuarta Circunscripción judicial de Río Negro con sede en Cipolletti y hay otras 30 personas inscriptas en el registro nacional. Así lo confirmaron fuentes con acceso al proceso y aseguraron que fue un año mucho más productivo que 2016. Sin embargo, la demanda de bebés como el principal requisito de los aspirantes no favorece la adopción ya que la mayoría de los niños superan los siete años.

La implementación del nuevo Código Civil y Comercial en 2015 modificó las condiciones de adopción en todo el país y creó un Registro Único de Aspirantes a Guarda con fines Adoptivos (Ruagfa). El principal interés en la reforma era evitar las adopciones directas que se daban con mucha frecuencia y generar un proceso que tenga un mayor seguimiento entre las personas interesadas y los niños y adolescentes en condiciones de ser adoptados.

Los tiempos

El nuevo proceso no estipula tiempos rígidos y la adopción dependerá de cuáles sean los requisitos de los interesados. Es decir que no importa el orden de llegada sino la búsqueda.

Por ejemplo, en Cipolletti hay una persona que lleva más de cuatro años esperando y otros que se inscribieron después y pudieron adoptar. En la cuarta Circunscripción hay 30 familias anotadas.

El problema radica en que la mayoría de las solicitudes apuntan a niños y niñas menores a dos años y, por ejemplo en Cipolletti, el promedio va de 7 a 13 años.

En Río Negro el proceso de adopción funciona en la órbita del Superior Tribunal de Justicia. El registro nacional Ruagfa está descentralizado con sede en las cuatro circunscripciones. En el caso de Cipolletti abarca toda la zona del Valle Oeste que incluye las ciudades de Catriel, Cordero, Cinco Saltos y Fernández Oro.

El proceso

La descentralización sirve para tener un mayor control pero el registro es nacional, es decir que si hay coincidencia con un niño, niña o adolescente del Chaco por ejemplo se podría llevar a cabo. Siempre tendrá prioridad en caso de una demanda similar la cercanía geográfica. Si bien el proceso es más directo y rápido, hay un tiempo para que el niño esté en condiciones de ser adoptado.

En primer lugar, luego de que se detecte un niño en “riesgo”, el juez tiene seis meses en los que facilitará todos los dispositivos del Estado para intentar que ese chico permanezca dentro de la órbita familiar, ya sea directa o ampliada. Si esto no ocurre llega el momento de la “sentencia de adopción” que ubicará al niño, niña o adolescente dentro del registro nacional.

El próximo 14 de septiembre se realizará en Cipolletti el cuarto taller destinado a aspirantes a guarda para adopción. En esta Circunscripción el Ruafga está a cargo Marta Bordón. Cada sede judicial tiene un referente. En Cipolletti está colaborando el departamento de Servicio Social que integran trabajadores sociales, psicólogos, psicopedagogos y los dos jugados de Familia.

Luego de la modificación del Código Civil en Río Negro se está trabajando en la capacitación y fortalecimiento tanto de los equipos interdisciplinarios como de los postulantes.

En números

Los tres tipos de adopción que existen

En el artículo 619 se reconocen tres tipos de adopción: plena, simple y de integración. La adopción plena confiere al adoptado la condición de hijo y extingue los vínculos jurídicos con la familia de origen; la simple confiere el estado de hijo adoptado pero no crea vínculos jurídicos, la adopción de integración se configura cuando se adopta al hijo del cónyuge o del conviviente. Sin embrago en casos excepcionales el juez puede mantener el vinculo jurídico con uno o varios parientes de la famila de origen en la adopción plena.

Entre los requisitos se solicitan datos personales, certificados de buena salud, de antecedentes, recibo de sueldo, certificado de matrimonio y convivencia en caso de que esté en pareja, certificado de hijo en caso de tener, foto familiar. El registro debe renovarse anualmente. El juzgado de Familia es el que dicta la resolución para inscribir al adoptante a la base de datos.